Dan Buettner es miembro de National Geographic y con los años se convirtió en un estudioso de la longevidad, llegando a escribir varios libros sobre el tema. Y en muchos de ellos toca un punto recurrente: qué se debe comer. Y hace un tiempo, luego de varios años de analizar de cerca la dieta de las personas que superan los 100 años, compartió con sus seguidores en las redes sociales el desayuno que se debe incorporar cada día para vivir esa cantidad de años.
Por supuesto que solo con un buen desayuno no se llega a tantos años. Sin embargo, desde el análisis científico, Buettner aplica sus conocimientos a un tema que siempre tiene sus misterios: cómo hacer para llegar a tan viejo y en buena forma.
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Para eso, la nutrición tiene un rol clave en la vida y tanto lo que se ingiere como el de qué manera se prepara, pasando por las cosas que sí o sí hay que suprimir o evitar de las dietas, juegan un papel fundamental y pueden servir para mover el amperímetro de la vida saludable.
Un desayuno para incorporar y un lugar para vivir 100 años
Durante muchos años, Dan Buettner dedicó su vida a investigaciones que, además de qué y cómo ingerir alimentos, abarcaron lugares para vivir, las denominadas “zonas azules” que, a priori, son esos lugares en los que la perspectiva de vida es mayor a otras regiones.
Y un punto del mapa que el investigador marcó es Nicoya, una localidad centroamericana de Costa Rica, donde se combina perfectamente la nutrición con la buena calidad de vida. Y desde ahí trajo este desayuno que recomienda y potencia para marcar una edad de tres cifras.
Y los alimentos que forman parte del desayuno van desde tortillas de maíz a base de ceniza de madera (las tortillas son ricas en carbohidratos complejos de baja glucemia y la ceniza de madera colabora en la liberación de aminoácidos esenciales) hasta los frijoles negros (que aportan antocianinas, que limpian el colon, reducen la presión arterial y mejoran la insulina) con arroz y verdura (redondean una importante fuente de proteína con todos los esenciales).
Claro que no sería desayuno sin un rico café. Y en este caso, Buettner recomienda el café de Costa Rica, que sirve como un shock de antioxidantes y que, por la cafeína que tiene, estimula el metabolismo.
Como si todo esto fuera poco, el investigador propone acompañar con un guiso de verduras (zanahorias y morrones picantes), con probióticos naturales y curcumina, que es antioxidante, antiinflamatorio y anticancerígeno.
Cómo preparar el desayuno que lleva a vivir 100 años
Entre los consejos que da Buettner, además de qué tipo de alimentación saludable y estilo de vida hay que tener para vivir muchos años, propone cómo realizar las preparaciones para alcanzar este desayuno clave.
Po ejemplo, las tortillas de Nixtamal, que consisten en remojar choclo en una solución de ceniza de madera o cal, que ayuda a liberar nutrientes clave y facilitar la digestión. Hacerlo de esta manera potencia el perfil nutricional del maíz, limpia al organismo del colesterol malo y potencia el bueno.
Otro desayuno típico en Nicoya es el gallo pinto, que Buettner recomienda porque es rico y proteínas y fibra. Se trata de una preparación con cebolla, ajo y salsa inglesa, y una cocción a fuego lento que es fundamental. Otra variante es una mezcla de comida probiótica con vitaminas y minerales, que consta de un guiso de frijoles con verduras condimentado con especias.
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Si bien pueden no parecerse en nada a los habituales desayunos que se toman en la Argentina, la realidad es que el desayuno que se acostumbra en Nicoya no deja de ser una alimentación basada comida sencilla y natural. Y esto influye de manera positiva en llegar a muy viejo y con buena salud.