El brócoli es una de las verduras más saludables, ya que contiene vitamina C, ácido fólico, fibra y antioxidante. Sin embargo, hay un error común al cocinarlo que puede destruir todo su potencial nutritivo de forma rápida, por eso se debe evitar.
Se trata de hervirlo demasiado. Cuando este vegetal se cocina en agua muy caliente más de los minutos requeridos, sus propiedades pueden perderse. El resultado de esto es una verdura demasiado blanda y sin color.
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¿Por qué no se debe hervir demasiado?
Las vitaminas hidrosolubles, como la C y algunas del grupo B, son muy sensibles al calor y al agua. Cuando el brócoli se hierve en exceso, pierde más del 50% de sus antioxidantes, su color verde vibrante se vuelve opaco y su textura se transforma en algo poco apetecible.
¿Cuál es el tiempo ideal para cocinar el brócoli?
Para que el brócoli mantenga todas sus propiedades, no se debe cocinar por más de 3 de minutos una vez que el agua esté hervida. Después de hervirlo, debés pasarlo inmediatamente por agua fría para cortar la cocción.
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La forma ideal para cocinar el brócoli
- Al vapor: Cocinarlo al vapor durante 3 a 4 minutos conserva la mayoría de sus nutrientes y su textura crocante. Es la técnica más recomendada por los nutricionistas.
- Salteado rápidamente: Un salteado breve con aceite de oliva también es una buena opción. El truco está en no pasarse de tiempo: 5 minutos como máximo.
- Al horno: Asarlo al horno con un poco de aceite y especias es otra alternativa rica y saludable. Aunque se pierden algunas vitaminas por el calor, mantiene más propiedades que al hervirlo.
