Aunque parece fácil, hacer pochoclos no es tan simple. Cocinar de más el maíz o un mal cálculo en la cantidad puede arruinar la preparación en cuestión de segundos.
Sin embargo, existen varios trucos para evitar hacer una desastre en la cocina. Y una de las respuestas podría estar en un simple paso que muchos desconocen: dejar el maíz en remojo antes de cocinarlo.
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Por qué recomiendan remojar el maíz
El proceso de remojo permite que los granos absorban agua, permitiendo que “estallen” de manera más uniforme y con una textura más suave. Al hidratarse, el maíz se cocina de manera más eficiente, evitando que queden granos sin explotar y logrando una consistencia ideal.
Cómo hacer este truco
- Seleccioná el maíz adecuado: asegurate de usar maíz para palomitas de buena calidad.
- Remojá los granos: colocá el maíz en un recipiente con agua y dejalo reposar durante al menos 30 minutos antes de cocinarlo.
- Secá bien: escurrí y secá los granos antes de llevarlos a la olla o máquina de palomitas.
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El resultado son palomitas más grandes, esponjosas y con un sabor más intenso. Este simple paso puede marcar la diferencia entre unas palomitas comunes y unas que realmente sorprendan a tus invitados.
