La inteligencia artificial llegó para quedarse y ya está transformando las formas de enseñanza y aprendizaje en el ámbito educativo. Mientras las nuevas herramientas digitales como ChatGPT se hacen cada día más populares, se instalan dudas que van de lo más apocalípticas a lo más esperanzadoras: ¿Cómo será la educación en el futuro? ¿Reemplazará la inteligencia artificial a los profesores? ¿Cómo afectará a los estudiantes?
“La inteligencia artificial impactará en la forma, pero no en los contenidos que se dan en el aula. Obligará a los docentes a ser más creativos al momento de tomar evaluaciones, y a los alumnos a emplear su imaginación y sus habilidades, características propias de los seres humanos que estas herramientas no son capaces de imitar”, explicó a TN Sandra Berta, neuropediatra especialista en neuropsicología Infantil.
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“ChatGPT debe ser considerada como una aplicación más, producto del avance de la tecnología. La utilización de inteligencia artificial llegó para quedarse. Bien utilizada ofrece enormes ventajas, como la optimización de los tiempos de búsqueda y acceso a la información, entre otras”, enfatizó la especialista.
Pero ChatGPT no es la única herramienta basada en inteligencia artificial que pueden ser utilizadas en contextos educativos. En su trabajo Artificial intelligence trends in education: A narrative overview, el académico francés Marcel Chassignol enumeró los diferentes sistemas de IA presentes en la educación:
- Sistemas de tutoría inteligente: diseñados para proporcionar experiencias de aprendizaje personalizada, pueden monitorear el progreso del estudiante, identificar áreas de dificultad y ofrecer una devolución y ayuda.
- Plataformas de aprendizaje adaptativo: adaptan los contenidos según el progreso individual del alumno.
- Sistemas de recomendación de contenidos: utilizan datos de aprendizaje previos para recomendar contenido de aprendizaje adicional y mejorar su comprensión del tema.
- Analítica de aprendizaje: técnica que utiliza datos de aprendizaje para ayudar a los educadores a comprender el rendimiento de los estudiantes y a tomar decisiones.
- Realidad virtual y aumentada: crean experiencias de aprendizaje inmersivas y personalizadas.
- Herramientas de escritura asistida por IA: ayudan a mejorar la escritura, proporcionando retroalimentación sobre gramática, ortografía, estructura y estilo.
- Reconocimiento de voz: permite interactuar a través de comandos de voz. Hace accesible los contenidos para las personas con discapacidades visuales o motoras.
- Chatbots educativos: diseñados para interactuar a través de chats y mensajes de texto. Pueden proporcionar respuestas a preguntas frecuentes y brindar orientación y soporte.
- Modelos de texto a imagen: son modelos de aprendizaje automático para generar imágenes digitales de alta calidad a partir de descripciones en lenguaje natural. El primer modelo de este tipo conocido fue Dall-e, desarrollado por la empresa OpenAI, seguido por Midjourney y Stable Diffusion.
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Con estos sistemas en cuenta, el enfoque que deberían tomar los docentes hacia la inteligencia artificial podría basarse en tres pilares:
- Aprender con la IA: en referencia al uso de herramientas de IA en las aulas.
- Aprender sobre la IA, estudiar sus desarrollos, aplicaciones y técnicas.
- Prepararse para la IA, por ejemplo, permitir que todos los alumnos comprendan la repercusión potencial de la inteligencia artificial en la vida humana.
Los límites de la tecnología y la necesidad de adoptar estrategias más creativas
Según pudo confirmar TN en base a entrevistas e investigaciones, en los últimos tiempos ha nacido en los equipos docentes un inédito temor: que los alumnos presenten trabajos elaborados con herramientas de inteligencia artificial y los reporten como de autoría propia.
Los maestros y profesores pueden aceptar el uso de herramientas de IA o ChatGPT como una fuente de acceso a la información y cambiar la estrategia de evaluación basándola en las restricciones que presenta esta tecnología.
Estas son algunas de las razones por las cuales la inteligencia artificial todavía está lejos de remplazar el rol de los docentes y la comunicación humana:
- La base de datos del chatbot de OpenAI incluye información de acontecimientos hasta aproximadamente septiembre de 2021.
- Tiene dificultades para captar matices de la comunicación humana, lo que tiene que ver con los aspectos pragmáticos de la comunicación.
- La falta de inteligencia emocional que se detecta fácilmente en la forma en como transmitimos determinada información cuando esta está muy cargada de contenido emocional.
- Tiene dificultades para generar contenidos largos y estructurados, así como también para generar respuestas sesgadas o discriminatorias.
- Además, un detalle no menor es que carece del sentido común de nivel humano.
¿Cómo impacta la tecnología en los niños en edad escolar?
Sandra Berta afirmó que el uso de la tecnología abrió un sinfín de posibilidades de acceso al conocimiento como nunca antes se había visto: “El hecho de que un niño pueda disponer de un dispositivo electrónico y conexión a internet, le permite ver y entender el mundo desde otra perspectiva. La tecnología simplificó la búsqueda de información, y la comunicación virtual”.
Más allá de ChatGPT, herramientas de inteligencia artificial como Midjourney y el flamante Bing Creator, entre otras, pueden potenciar la creatividad de los chicos. Y no solo mejoran los procesos educativos, sino que brindan ayuda a las tareas diarias de la escuela o universidad. Y además entretienen y dan ideas para abrir creatividad de los alumnos.
Como lo fue Internet a fines de los 90, hoy la inteligencia artificial está transformando el aprendizaje en una actividad más entretenida y creativa, tanto de manera individual como grupal.
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Los riesgos de la inteligencia artificial en la educación
Según un informe de la UNESCO, la inteligencia artificial tiene la capacidad de hacer frente a algunos de los mayores desafíos que afronta, hoy en día, el ámbito de la educación. Se trata de desarrollar prácticas de enseñanza y aprendizaje innovadoras y, finalmente, de acelerar el progreso en la consecución del Objetivo de Desarrollo Sustentable 4: garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.
Pero estos avances tecnológicos rápidos implican inevitablemente numerosos riesgos y retos, que los debates sobre las políticas y los marcos reglamentarios tienen aún dificultades para poder superarlos. Para el organismo, la IA debe permitir que cada persona pueda sacar provecho de la revolución tecnológica en curso y acceder a sus beneficios, fundamentalmente en materia de innovación y saber.
Y sostiene que el despliegue de las tecnologías de inteligencia artificial en la educación debe tener como objetivo la mejora de las capacidades humanas y la protección de los derechos humanos con miras a una colaboración eficaz entre humanos y máquinas en la vida, el aprendizaje y el trabajo, así como en favor del desarrollo sostenible.