La ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, está en el quirófano por un cuadro de apendicitis. Fuentes oficiales confirmaron que la intervención se hará en el Sanatorio Otamendi, en la Ciudad de Buenos Aires. “Está bien de ánimo. La van a intervenir quirúrgicamente. Al finalizar, habrá un comunicado oficial sobre su evolución”, indicaron fuentes del Ministerio de Salud.
De acuerdo con lo informado, la funcionaria estaba hoy en Mar del Plata, donde debía reunirse con sus pares del país para encabezar el Consejo Federal de Salud (COFESA), y comenzó a sentirse mal. Con Bienestar habló con un especialista para saber qué es una apendicitis, cuáles son los síntomas y porqué debe operarse rápido.
Por qué Carla Vizzotti fue a cirugía
Diego Bares (M.P. 111.650), especialista consultor en Clínica Médica y jefe de Servicio de Clínica Médica de Admisión HIGA San Martín de La Plata, explicó que es “un proceso inflamatorio del apéndice”, es decir, cuando “una pequeña porción del intestino (casi en la unión del intestino grueso con el delgado) se inflama por alguna obstrucción (generalmente con algún fecalito), lo que hace que ese pedazo de intestino tenga isquemia (falta de irrigación) y se sobreinfecte”.
Según precisó el especialista, el tratamiento “sí o sí, es quirúrgico”. “Representa una emergencia que no se puede posponer. Generalmente, son cirugías que no presentan inconvenientes. Se realiza una apendicectomía, se saca el pedazo de intestino infectado y se soluciona el tema. Es una intervención muy sencilla”, precisó el especialista.
¿Qué es una apendicectomía?
Se trata de una cirugía abierta, de entre 5 a 10 centímetros, por donde el personal de salud ingresa al organismo del paciente con el instrumental y una videocámara para extraer la zona infectada. De acuerdo con el Hospital Universitario Austral, el procedimiento “consiste en ingresar a la cavidad abdominal, identificar el apéndice, ya que este puede estar en variadas posiciones, constatar el diagnóstico preoperatorio, seccionar la arteria que irriga al apéndice, llegar a la base del mismo y seccionarlo entre ligaduras. Se retira de la cavidad cuidando que no toque los bordes de la herida, se lava el área y si hay pus, se deja un drenaje por 48 horas”.
¿Cuándo se indica una apendicectomía?
Según los especialistas del Hospital Universitario Austral, se indica “siempre que se diagnostica un cuadro de apendicitis aguda (rápido comienzo de los síntomas)”. El objetivo de la cirugía es controlar el foco infeccioso intra-abdominal, por lo que se procede a la remoción del apéndice cecal.
¿Cuáles son los principales riesgos de la apendicectomía?
Presenta los habituales para todas las anestesias generales. Los riesgos particulares son la apertura del muñón apendicular lo que genera fístula del colon hacia la cavidad o la piel, sangrado por la ligadura de la arteria, infección de la herida (más frecuente en la vía abierta), parálisis intestinal transitoria por el contacto del líquido purulento en la cavidad y manoseo de las asas, cuadro febril post operatorio, colecciones líquidas en la cavidad.
La laparoscopía, otra técnica quirúrgica
Con la vía laparoscópica, que se hace desde los años 90, ha cambiado la historia de la cirugía de apéndice. “Se entra por una incisión de 1 cm por el ombligo, se coloca una cámara, se puede revisar toda la cavidad y lavar abundantemente la misma en caso de necesidad por una peritonitis. Con una incisión de 5mm y otra de 10mm, se introducen las pinzas en la cavidad para movilizar el apéndice, separar otras vísceras, seccionar la arteria, ligar la base del mismo y extraerlo. Con esta técnica se han disminuido significativamente las infecciones, los pacientes tienen menos dolor, puede iniciar la ingesta tempranamente y la recuperación postoperatoria es más corta ya que prácticamente no se realizan cortes sobre los músculos. También se pueden resolver patologías asociadas o que no se habían diagnosticado, explicaron desde el Hospital Austral.
¿Qué diferencia hay entre apendicitis y peritonitis?
“La apendicitis aguda es una inflamación e infección del apéndice cecal que está ubicado en la base del colon derecho, precisamente en la zona llamada ciego. Cuando la infección se localiza solamente en el apéndice se llama apendicitis, y cuando se generaliza por la cavidad abdominal (que está cubierta por una membrana llamada peritoneo) se llama peritonitis, que puede ser localizada en el área del apéndice o generalizada a todos los espacios peritoneales”, amplían los especialistas del Hospital Austral.
¿Cuáles son los síntomas de apendicitis?
El cuadro de apendicitis se da cuando ese órgano se inflama. Consultado sobre las señales de esta enfermedad inflamatoria infecciosa, el médico cirujano del Hospital Churruca Visca, Marcelo Rondina (M.N. 66.830), le dijo a Con Bienestar que es la causa quirúrgica más frecuente de hospitalización y cirugía de urgencia.
Además, el médico compartió las siguientes claves para tener en cuenta sobre los síntomas:
- Inicio brusco del dolor: el primer signo de atención es que pasadas las 12 horas el paciente no siente alivio. El dolor suele ubicarse en la parte superior del abdomen, en el epigastrio (boca del estómago) o en la zona peri umbilical (alrededor del ombligo) para luego desplazarse y focalizarse a la zona inferior sobre la derecha (fosa ilíaca derecha). “Cabe destacar que casi un 25% de los pacientes comienzan directamente con molestias en el lado derecho”, dijo el especialista.
- Vómitos y náuseas: también son síntomas que suelen estar desde el comienzo y aparecen de forma repentina. Para tener en cuenta, suele haber más náuseas que vómitos, a diferencia de la gastroenteritis, por ejemplo. Este síntoma es una reacción vasovagal, es decir cuando la intensidad del dolor provoca que el estómago se revuelva.
- Fiebre: es otro de los signos y constituye -junto con el dolor y los vómitos- lo que se conoce como “triada de Murphy”, algo muy representativo de cuadros apendiculares.
- Constipación o diarrea: el cuadro inflamatorio produce una alteración funcional en el intestino, que, en algunos pacientes, hace que este se contraiga más rápido y se vacíe, produciendo una diarrea. En otros casos, el intestino se inhibe y bloquea el movimiento al desencadenarse más dolor, lo que provoca estreñimiento.
- Falta de apetito: al detenerse el intestino, el cuerpo bloquea la sensación de hambre, rechaza de forma instintiva todo alimento para no hacer trabajar al tubo digestivo, donde hay un proceso infeccioso.
“La medicación sin evaluación profesional puede enmascarar y retrasar el diagnóstico de una enfermedad de resolución eminentemente quirúrgica”, remarcó el cirujano. “El diagnóstico llega a través de una consulta médica temprana, análisis de sangre y orina, además de una radiografía y una ecografía que puede complementarse con una tomografía computada en caso de duda”, indicó.