Un equipo de científicos de la Universidad de Emory y del Instituto de Tecnología de Georgia en Gran Bretaña probó exitosamente una vacuna contra la gripe que se aplica en una especie de parche o "curita" que no pincha ni duele. Esta nueva tecnología podría poner fìn en el futuro al sufrimiento de chicos y adultos que tienen fobia a las agujas de las inyecciones.
El método ya pasó por varias etapas de prueba con importantes resultados de seguridad y efectividad en seres humanos. A diferencia de las vacunas regulares que avanzan hasta el músculo, este parche cuenta en su parte adhesiva con alrededor de un centenar de microagujas finas que penetran varias capas de piel sin causar ningún tipo de dolor en los pacientes.
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Una de sus grandes ventajas es que no precisa ser almacenada en frío como las vacunas tradicionales, así que los parches podrían comercializarse en las farmacias directamente expuestos en las estanterías. "Si la mirás con el microscopio lo que ves son agujas pequeñas. Pinchan la piel sin causar dolor", manifestó Mark Prausnitz, uno de los investigadores que trabajó en su desarrollo.
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Prudencia a la espera de más estudios
El equipo de Prausnitz probó el nuevo recurso en aproximadamente 100 voluntarios, la mayoría de los cuales dijo que no causó dolor, aunque en algunos casos generó enrojecimiento, picazón o sensibilidad en la zona de la piel en la que se había aplicado. Los especialistas dicen que el parche podría revolucionar la administración de las vacunas, aunque todavía hace faltan hacer más ensayos clínicos antes de que este sistema de inmunización se apruebe para un uso generalizado.
