Géminis es el signo mutable del elemento aire, su símbolo representa a los gemelos que van cada uno para un lado diferente.
Es el primero de los signos que se simboliza con un humano y también es un signo dual.
En épocas actuales, donde tanta abundancia de comunicación incomunica, es interesante ver las cualidades natas de este signo.
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Durante un mes el Sol retransmite en gran medida esta energía, buscando entre otras cosas que se puedan construir puentes, que se dialogue, que se tenga una escucha activa.
En Astrología Fhers, el estudio de la Carta Natal Kármica, da herramientas para transmutar el karma relacionado con la comunicación.
Hoy en Buen karma, con la mirada en el cielo y los pies en la tierra, vamos a hablar del signo de Géminis, sin dejar de lado a los que tienen el ascendente o la luna en ese lugar.
La comunicación
Tener una buena comunicación permite transmitir a otros lo que se conoce, por otro lado, también permite adquirir conocimientos de otros.
Si lo llevamos al plano de los sentimientos, la comunicación también permite transmitirlos y receptarlos.
Con los vínculos cercanos, se empieza a desarrollar este ida y vuelta.
Mercurio, planeta regente de Géminis, es quien rige la mente concreta; por otro lado, Júpiter -regente de Sagitario su opuesto y complementario-, rige la mente abstracta que da rienda a la imaginación.
Y hablando de la mente, sabemos que no distingue lo real de lo imaginado. La presencia sostenida de pensamientos negativos y pesimistas termina afectando de alguna manera el cuerpo físico, ya sea con alguna enfermedad, estrés y miedos.
Esto te aleja de los objetivos importantes e impide el aprendizaje.
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De aquí muchas veces surgen las críticas o los celos hacia los demás, que son inarmonías típicas de este signo.
El comercio también es influenciado por este signo, aquí además de las idoneidades típicas del rubro, la buena comunicación es fundamental para el trato con los clientes, la difusión de lo que se vende y hace.
Los hermanos
Como mencionamos, ya el nombre de este signo del zodiaco habla de los gemelos, por eso es ineludible la alusión a los hermanos.
Al igual que en otros signos como Piscis, acá existe una dualidad, en el otro caso son dos peces.
Esa dualidad es parte del trabajo a realizar con los hermanos. Se pueden unir desde el centro o permanecer en los extremos.
No son nocivos los extremos, sí lo es permanecer tozudamente en ellos, Géminis es un signo mutable, nos pide adaptabilidad y predisposición a los cambios.
Los hermanos son personas con quienes se tiene un vínculo kármico muy fuerte, y a pesar de los conflictos que puedan darse en esta vida con ellos, si están ahí es porque en vidas pasadas se han compartido muchos buenos momentos juntos.
Tenerlos como apoyo en las distintas vivencias actuales es de gran utilidad.
Los hermanos nos permiten tener vivencias que de otra manera no podrían darse.
El planeta Mercurio, la casa terrestre donde Géminis marca una cúspide y los indicadores sobre el signo indican en una carta natal kármica las vivencias que se pueden tener con hermanos, primos y amigos muy cercanos que muchas veces se sienten y tratan como un hermano más.
Géminis en ascendente
Así como los signos y aspectos entre planetas indican la evolución que se trae de vidas pasadas, las casas terrestres marcan el área de la vida actual donde se va a dar la cosecha.
El ascendente es la cúspide de la casa primera, ahí podemos observar en una carta natal kármica lo relacionado con el cuerpo físico y la personalidad.
Un geminiano en ascendente, se caracteriza por ser muy curioso, ya desde la infancia es alguien que pregunta mucho y necesita poder comprender como ocurren las cosas.
Tiene capacidad para comunicar sus ideas, prevalece la mente y escucha activa.
En general es bien hablado, culto, educado y tiene el conocimiento suficiente para defender sus puntos de vista.
Luna en Géminis
Cuando alguien tiene a este satélite natural en Géminis, lo racional prevalece sobre lo emocional. Tiene una gran capacidad de adaptación a medios ambientes y personas diferentes, les encanta viajar y aprender sobre otras costumbres y lugares, no les gusta desperdiciar el tiempo, emprendiendo varias cosas a la vez.
En tiempos modernos, suelen tener una adolescencia extendida.
