Al hablar de Géminis, estamos hablando de vínculos con pares muy cercanos como hermanos, primos y vecinos.
Por otro lado, Sagitario, su signo opuesto y complementario, representa la religión, la política, lo que puede ampliar esos vínculos con un núcleo de personas mucho más grande, por ejemplo, sintiendo las necesidades del otro como propia.
Júpiter, planeta regente de Sagitario y quien mejor fama tiene en astrología, comienza a transitar el signo de Géminis a partir de este fin de semana y hasta el mes de junio de 2025.
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Además de su benevolencia y expansión, permite a los geminianos tener oportunidades para ampliarse.
En Astrología Fhers, con el estudio de la Carta Natal Kármica, viendo al signo de Géminis, Sagitario y sus indicadores, se puede apreciar lo logrado o no en vidas pasadas con los vínculos cercanos y grupos mucho más amplios.
Hoy en Buen karma, con la mirada en el cielo y los pies en la tierra, vamos a realizar un desarrollo de lo que puede dejar este nuevo pasaje de Júpiter por el signo de los gemelos y los apoyos que va a tener en la primera parte del recorrido.
Géminis y los hermanos
Ya el nombre de este signo del zodiaco habla de los gemelos, por eso es ineludible la alusión a los hermanos. Al igual que en otros signos como Piscis, acá existe una dualidad, en el otro caso son dos peces.
Esa dualidad es parte del trabajo a realizar con los hermanos, que se pueden unir desde el centro o permanecer en los extremos.
No son nocivos los extremos, pero sí lo es permanecer en ellos, Géminis y Piscis son signos mutables, pide adaptabilidad y predisposición a los cambios.
Los hermanos son personas con las que se tiene un vínculo kármico muy fuerte. A pesar de los conflictos que puedan darse en esta vida con ellos, si están ahí es porque en vidas pasadas se han compartido muchos buenos momentos juntos.
Tenerlos como apoyo en las distintas vivencias actuales es de gran utilidad. Los hermanos nos permiten tener vivencias que de otra manera no podrían darse.
Las armonías y puntos de apoyo
El Sol y Venus se encuentran en los primeros grados del signo de Géminis, le dan la bienvenida a Júpiter con aspectos armónicos con los otros signos del elemento aire, vamos a mencionar los principales.
Sol Trígono Plutón
Plutón está en posición retrógrada en el grado 1 del signo de Acuario, armonizando al Sol, Venus y Júpiter.
Este planeta, el más pequeño del sistema solar y considerado planeta enano, en astrología se lo interpreta como el que realiza los cambios profundos, lentos y a paso firme.
La armonía con el Sol implica un gran poder de voluntad para regenerarte tanto a vos como a irradiar los cambios positivos a tu entorno.
Venus Trígono Plutón
A la fuerza de voluntad, el planeta Venus le aporta el realizar las cosas con amor y por amor.
Ya no es solo cambios pensando egoístamente en ganar y tener bienestares temporales, sino que se le incorpora toda la energía sublime y creadora venusina.
Júpiter en Géminis
Y vamos ahora a la vedette principal de los tránsitos en Géminis. El Sol y Venus transitan el signo por un mes, mientras que Júpiter lo hace por algo más de un año.
El trígono con Plutón lo tiene hasta mediados de junio, y proporciona para quienes sean sensibles la oportunidad de una regeneración profunda, da mejor predisposición para meditar, irse por un rato del mundanal ruido, charlar con la almohada.
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El signo de Géminis es el más favorecido, si sos geminiano, anota 13 meses en tu agenda para estar alerta a los cambios.
El planeta regente de Géminis es Mercurio, que rige la mente concreta, ampliando entonces lo que se puede esperar de este periodo anual es que la curiosidad lleve a realizar nuevas preguntas que antes no aparecían.
Es un momento para cuestionar y evaluar otras alternativas a las problemáticas actuales. La ciencia y la tecnología pueden desarrollarse más aún, podemos pensar por ejemplo, en nuevas utilidades de la inteligencia artificial que está en auge y expansión.
Júpiter expande, y a veces expande las antivirtudes, al estar en un signo mental es importante ser coherente, que haya armonía entre el querer, pensar, decir y hacer.
A las personas con falta de coherencia, toda esta energía benevolente le podría jugar en contra.
