Las salsas vegetales ganan espacio en la cocina cotidiana por ser opciones más livianas y rápidas. Una de las más prácticas es la salsa cremosa de palta y espinaca, que se hace sin lácteos ni cocción. Esta salsa es perfecta para acompañar pastas caseras.
La base de esta salsa es la palta. Se combina con hojas de espinaca cruda, que intensifican el color verde y agregan nutrientes. La lima realza el sabor y retrasa la oxidación de la palta. El aceite de oliva permite conseguir la textura homogénea.
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Para hacerla hay que procesar 1 palta madura, 1 taza de hojas de espinaca, jugo y ralladura de ½ lima, 2 cucharadas de aceite de oliva, sal y pimienta. También se puede agregar 1 diente de ajo o un puñado de albahaca. La salsa tiene que quedar espesa. No se recomienda calentarla directamente.
Esta receta es una forma simple de incorporar vegetales y grasas saludables en una comida completa. No requiere ingredientes difíciles ni técnicas avanzadas y, lo mejor de todo, se prepara en menos de 20 minutos.
Receta de spaghetti caseros
Ingredientes:
- 300 g de harina 0000
- 3 huevos
- 1 pizca de sal
Preparación:
- Formar una corona con la harina sobre la mesada. Colocar los huevos y la sal en el centro.
- Mezclar con un tenedor desde el centro hacia afuera e integrar con las manos.
- Amasar 8–10 minutos hasta lograr una masa lisa y firme. Tapar y dejar reposar 30 minutos.
- Estirar la masa con palo de amasar o máquina hasta dejarla fina.
- Cortar en tiras finas tipo spaghetti.
- Cocinar en agua hirviendo con sal de 2 a 3 minutos o hasta que estén al dente.
