La lechuga es uno de los ingredientes más comunes en las ensaladas, pero sus posibilidades no terminan ahí. Aunque se la suele asociar con comidas frescas y crujientes, este vegetal cocido es una opción interesante que se ha utilizado en diversas cocinas alrededor del mundo.
Al someterla a cocción, la lechuga se suaviza y adquiere una textura tierna y un sabor delicado que permite combinarla con otros ingredientes de manera versátil. En Francia, por ejemplo, es común encontrarla en guarniciones al vapor, mientras que en Asia se emplea en sopas o salteados.
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Opciones para cocinar la lechuga
Además de su sabor suave, la lechuga cocida puede ser una excelente aliada para quienes buscan variar sus recetas y sumar verduras de manera diferente a la dieta. Entre sus principales beneficios se destacan su alto contenido de agua, vitaminas y minerales, lo que la convierte en una opción nutritiva y baja en calorías.
Incorporar la lechuga cocida a la dieta puede ser una manera ideal de aprovecharla cuando comienza a perder su frescura o cuando buscamos experimentar nuevas recetas. En guisos, sopas o incluso rellenos, la lechuga se convierte en un ingrediente. A continuación, tres opciones.
Sopa de lechuga y papa (para 4 personas)
Ingredientes:
1 cebolla picada
2 papas medianas, cortadas en cubos
2 tazas de caldo de verduras
1 manojo de lechuga (puede ser criolla o manteca), cortada en tiras
Sal y pimienta al gusto
Aceite de oliva
Crema y crutones para servir (opcional)
Preparación: en una olla, sofríe la cebolla con un poco de aceite de oliva hasta que esté transparente. Agregá las papas y el caldo de verduras. Cociná a fuego medio hasta que las papas estén tiernas. Sumale la lechuga cortada en tiras, sazona con sal y pimienta, y cocina por unos minutos más. Procesá todo con una licuadora de mano hasta obtener una sopa cremosa. Serví con un toque de crema y crutones para un plato reconfortante.
Lechuga a la parrilla con limón (para 2 personas)
Ingredientes:
2 lechugas romanas
Aceite de oliva
Sal y pimienta
Jugo de 1 limón fresco
Preparación: cortá las lechugas romanas a lo largo en mitades. Pincelalas con aceite de oliva y sazonalas con sal y pimienta. Colocá las mitades de lechuga en la parrilla caliente y cociná durante un minuto por cada lado o hasta que aparezcan marcas doradas. Retirá y exprime jugo de limón fresco por encima antes de servir.
Lechuga rellena con ricota y nueces (para 2 personas)
Ingredientes:
8 hojas grandes de lechuga criolla o manteca
200 g de ricota
50 g de nueces picadas
Ralladura de 1 limón
Sal y pimienta al gusto
2 tazas de salsa de tomate casera
Preparación: blanqueá las hojas de lechuga sumergiéndolas por un minuto en agua hirviendo con sal, y luego en agua fría para cortar la cocción. En un bol, mezclá la ricota, las nueces picadas, la ralladura de limón, la sal y la pimienta. Rellená cada hoja de lechuga con una porción de la mezcla y forma rollitos. Acomodá los rollitos en una fuente, cubrilos con salsa de tomate y horneá por 10 minutos a temperatura media.
