El estreñimiento es un problema común que afecta a personas de todas las edades. Una dieta rica en fibra, especialmente en frutas, puede ser una solución natural y efectiva para mantener una digestión saludable.
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Consultamos a varios expertos en nutrición para descubrir cuáles son las mejores frutas para combatir el estreñimiento.
- Ciruelas pasa, un clásico remedio natural. Carla Sánchez, licenciada en Nutrición y Dietética por la Universidad Complutense de Madrid, explica que las ciruelas pasa “son ricas en sorbitol, un tipo de azúcar natural que actúa como un laxante suave, ayudando a regular el tránsito intestinal”. Además, contienen fibra insoluble que agrega volumen a las heces y facilita su paso por el intestino.
- Kiwi, la fruta verde con poderes laxantes: según la nutricionista Laura Gómez, miembro del Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Cataluña, “el kiwi es especialmente rico en fibra y contiene actinidina, una enzima que mejora la digestión y promueve el movimiento intestinal”. Gómez recomienda consumir uno o dos kiwis al día para mantener un intestino regular.
- Manzana, un aliado digestivo versátil: especialmente cuando se consume con cáscara, es una excelente fuente de fibra. La nutricionista Ana María Torres, especialista en salud digestiva, afirma que “la pectina, un tipo de fibra soluble presente en las manzanas, actúa como un prebiótico, alimentando las bacterias buenas del intestino y ayudando a mantener una digestión saludable”. Para aprovechar al máximo sus beneficios, Torres sugiere comer la manzana con cáscara y acompañarla con un vaso de agua.
- Peras, dulzura natural que facilita el tránsito: son otra fruta rica en fibra y sorbitol. “Las peras no solo son hidratantes debido a su alto contenido de agua, sino que también contienen fibra soluble e insoluble, lo que las convierte en una opción excelente para prevenir el estreñimiento”, comenta la nutricionista Beatriz Martínez, directora de la clínica Nutrición Integral en Madrid. Ella sugiere incluir una pera en la dieta diaria, especialmente como merienda o postre.
Además de incorporar estas frutas en la dieta, los nutricionistas aconsejan beber abundante agua y mantenerse activo físicamente. “La combinación de una dieta rica en fibra, hidratación adecuada y ejercicio regular es clave para prevenir y tratar el estreñimiento”, concluye Carla Sánchez.
Si no hay mejora debe recurrirse al tratamiento farmacológico siempre prescrito por un profesional sanitario. Por ejemplo, los laxantes, fármacos que se toman vía oral. Los enemas, que se prescriben a los pacientes que no responden a los laxantes orales, o también existe el biofeedback, que consiste en un método de aprendizaje o rehabilitación para que el paciente relaje los músculos del suelo pélvico durante la defecación.
