Hay alimentos que ayudan a controlar el peso de las personas y mejoran la salud. También están aquellos que aseguran una función sexual óptima en cualquier momento y a cualquier edad.
La experta Christine DeLozier, autora de “Dieta para un buen sexo” (Diet For Great Sex es su título original), comparte algunos consejos para aprender a comer con el fin de fomentar el placer sexual.
“Pensamos en el buen sexo como una experiencia de la mente, pero fisiológicamente son nuestros nervios los que disparan señales rápidas e intensas hacia y desde nuestros genitales. Eso sucede siempre y cuando la sangre fluya adecuadamente y las hormonas sexuales estén equilibradas”, advierte la autora.
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Christine estudió biología y psicología en la Universidad de Rochester, Nueva York. Se especializó en salud sexual. “Nuestros cuerpos explotan de placer cuando los nervios, los vasos sanguíneos y las hormonas actúan en sincronía”, detalla la especialista en su perfil de Facebook y remarca también que la investigación moderna demuestra que la dieta afecta al sexo. “Puede aumentar o frustrar el placer”, indica.
Según su estudio, estas son algunas reglas a seguir:
- Evitar la grasa y el azúcar: “Los alimentos grasos y salados endurecen los vasos sanguíneos en cuestión de horas, lo que conduce a una reducción del flujo sanguíneo”, advierte Christine. “Un fuerte suministro de sangre no sólo es importante para el deseo sexual masculino, sino que también es esencial para el placer femenino y el orgasmo. Una dieta alta en grasas, tener enfermedades crónicas y envejecimiento prematuro, por ejemplo, ralentizarán los nervios y reducirán el placer sexual”, argumenta. "Los alimentos grasos también causan acumulación de placa y como los vasos sanguíneos que irrigan al pene y el clítoris son algunos de los más pequeños, serán los primeros en afectarse. Mucho antes de que una persona vea signos de enfermedad cardíaca, nota que el placer sexual y la función disminuyen”, ejemplifica.
- Comer verduras: “Los vegetales verdes son lo mejor para el cuerpo y para tener un sexo pleno”, resume Christine. Consumir hojas verdes, como espinacas y lechuga, reduce el cortisol ayudando a normalizar los niveles de testosterona, que son importantes para el placer sexual masculino y femenino. "Son ricos en antioxidantes para ayudar a nuestros vasos sanguíneos a entregar más flujo sanguíneo. Un puñado al día sería genial o sería más agradables mezclado con fruta en un batido”, sugiere.
- Consumir vitaminas B: “Aumentar este grupo vitamínico es bueno porque afecta los niveles de testosterona y mejora la función sexual,” revela Christine. "Las vitaminas B son esenciales para una conducción nerviosa adecuada hacia y desde los genitales. Protegen los nervios contra los efectos del estrés oxidativo, que ralentiza las señales y significa menos placer para los adultos”, describe. Las vitaminas del grupo B se encuentran en paltas, nueces y semillas, también en las proteínas como pescado, pollo, carne de vaca, huevos y productos lácteos.
- Sumar condimentos: "El romero, el anís, el ajo, el jengibre, la canela y las bayas de goji aumentan la función sexual y la libido. Alimentan el ‘yang’ renal y promueven la circulación de sangre y qi –el término de la medicina tradicional china para la energía del cuerpo”, enumera Christine que también hace acupuntura. Almendras, pimienta negra, ajíes, chocolate, ostras y azafrán se encuentran entre los alimentos considerados afrodisíacos.
“Cuando nuestros cuerpos están bien nutridos, el deseo viene naturalmente, el placer se hace presente, y el orgasmo llega sin esfuerzo” concluye la autora.
