Después de sufrir un accidente de tránsito, lo rutinario es realizarse estudios para revisar que no haya daños internos por los golpes. Así fue el proceso que atravesó una mujer china de 29 años que protagonizó un choque. Aunque nadie se imaginaba lo que iban a encontrar los médicos.
La mujer, llamada Zhu, visitó el hospital para someterse a una tomografía computarizada. Tuvo de inmediato una buena noticia: el impacto no le generó lesiones. Pero también hubo sorpresa: los médicos que revisaron la placa observaron dos objetos metálicos de cinco centímetros de largo clavados en su cerebro.
Eran agujas, enormes, con un ancho de aproximadamente 4,9 milímetros y un largo de cinco centímetros. Más allá del tamaño, la mujer contó que nunca antes se había sentido mal y que ni siquiera tuvo dolores de cabeza.
Por el diámetro de los objetos metálicos, es difícil pensar en que pueden haber perforado un cráneo desarrollado, un cráneo adulto. Por ese motivo, los médicos creen que las agujas podrían haber sido insertadas deliberada o accidentalmente en la cabeza de Zhu cuando era una niña.
Según el personal de salud que la atendió, si bien los objetos punzantes no se encuentran en un área de función importante del cráneo, la recomendación es eliminarlos mediante una cirugía de alta complejidad.
Otra situación inexplicable
A principios de septiembre, en Rusia, sucedió otro hecho extraño. Una mujer decidió dormir una siesta en el patio de su casa, bajo un árbol. Algo normal, o eso parecía. Al despertarse, comenzó a sentirse mal y le costaba respirar.
Sus familiares la llevaron de urgencia al hospital. Los médicos sabían que había algo adentro de su cuerpo que no debía estar ahí. Para descubrir qué era, la anestesiaron de forma general.
// Una serpiente entró por la boca de una mujer que dormía una siesta
Con la ayuda de un tubo negro -parecido al del endoscopio-, lograron extraer a la intrusa. Era una serpiente. La situación fue tan sorprendente y extraña que hasta los médicos retrocedieron al ver al animal salir de la boca de la mujer.
El video dentro del quirófano que se difundió en los medios locales y se viralizó en redes sociales por todo el mundo, no es apto para impresionables. En él, se puede ver a la paciente recostada en la camilla y dormida. Al parecer, la mujer durmió la siesta con la boca abierta y el reptil, de un metro de largo, aprovechó el descuido y se deslizó hacia su interior sin despertarla.