Una gran cantidad de músculos vienen a insertarse en la zona occipital (hueso que se sitúa en la parte posterior e inferior de la cabeza). El estrés, las preocupaciones y el elevado ritmo de vida que llevamos nos provocan tensión en toda esta musculatura de la zona dorsal alta y cervical produciéndonos dolores de cabeza más o menos fuertes.
Además, si unimos esto al uso constante de la musculatura de la cara, nos encontramos con una zona muscular en exceso de trabajo, músculos que se transfieren la tensión de unos a otros y que pueden provocarnos problemas como vista cansada, dolores o crepitaciones en la articulación temporomandibular, dolores de cabeza…
La terapia sacrocraneal nace como parte de la osteopatía. Hacia principios del siglo XX, el osteópata W. Sutherland D.O. estudió el cráneo y comenzó a investigar sobre lo que llamó mecanismo sacrocraneal.
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En concreto, trata de estimular la curación mediante el uso suave de presión de las manos para manipular el esqueleto y los tejidos conectivos, especialmente el cráneo y el sacro (el hueso grande y triangular situado en la base de la columna vertebral). Por lo tanto, constituye un punto estratégico del organismo, cuyo bienestar o malestar repercute más que considerablemente en otras zonas. Es una técnica manual que respeta la situación corporal, es agradable, tranquiliza y calma.
“Un buen masaje craneosacral debe ser realizado por las manos de un osteópata altamente profesional y capacitado. Él será la persona indicada para comenzar con este tipo de tratamiento. Durante el mismo, el profesional realiza la técnica de la palpación. Irá colocando sus manos en las zonas indicadas para este tratamiento e irá palpando la forma en la que circula el líquido cefalorraquídeo. Realizando así masajes en toda el área para lograr liberar todo tipo de tensiones.”, detalla José Ramón Rodríguez Aranda, osteópata y fisioterapeuta de España.
Beneficios de un masaje craneosacral
Un masaje craneosacral brinda una serie de beneficios increíbles entre los que encuentran:
- Estimular el sistema inmunológico
- Mejorar el flujo de la sangre
- Ayuda a reducir la inflamación de diversos tejidos
- Permite calmar todo tipo de molestias a nivel muscular
- Relajar la tensión de los ojos
- Reducir los niveles de ansiedad o estrés
- Incrementar la sensación de descanso
- Aliviar el cansancio a nivel mental
- Estimular el crecimiento del cabello
La terapia craneosacral implica el movimiento de las extremidades, la caja torácica, la palpación de caderas y hombros, el contacto con el cráneo, la columna vertebral y el hueso sacro, para identificar los posibles bloques que luego serán tratados con diversas técnicas (tracciones faciales, técnicas de compresión y descompresión).
La sesión de tratamiento dura entre 40 y 60 minutos; la primera sesión comienza con la consulta terapéutica para identificar los problemas a tratar. Durante la sesión también se pueden contemplar música y luces suaves para favorecer la relajación.
Un masaje cráneofacial es ideal para atacar diversas dolencias, pero además se obtienen diversos beneficios para la salud. No solo libera de presiones y niveles altos de estrés. También se obtiene una piel más saludable, se reducen las ojeras y se obtiene un rostro más fresco.