Damián Tovar Luna es reconocido en la zona norte de Buenos Aires por su personaje llamado Axl a la gorra, que rinde tributo a Axl Rose y a la afamada banda de rock Guns & Roses. A los 27 años, fue diagnosticado con diabetes tipo 1 que es cuando el cuerpo no produce insulina o produce muy poca, y suele diagnosticarse en niños o adultos jóvenes.
“Tengo que usar bota ortopédica por un par de meses porque tengo pie de Charcot. Es una deformidad en los huesos por la diabetes que se va generando y que afecta los huesos si no la controlás bien”, anunció Damián en su cuenta de Instagram. “Voy a estar haciendo vídeos en casa, en vivo y saliendo lo menos posible a trabajar a los bares, restoranes y eventos para poner en primer lugar mi salud, ya que el estar mucho tiempo de pie, retrasa el tratamiento”, aclara.
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Damián se atiende en el Hospital Tornú y un podólogo particular le hace el seguimiento de su pie diabético. “Empecé a tener hinchazón en el pie, como si estuviera reteniendo líquidos, lo sentía afiebrado, pero no tenía dolor ni molestia. Sí menos sensibilidad”, reconoce el artista que aún con Bota Walker cumplió con un show de su banda tributo RockOverAll.
La neuroartropatía de Charcot
La neuroartropatía de Charcot es una enfermedad degenerativa progresiva que afecta las articulaciones del pie. Es compleja por la combinación de lesión ósea y de partes blandas.
“Es una enfermedad infrecuente, pero causal de discapacidad grave, producida principalmente por la Diabetes Mellitus, que daña los nervios, afecta los vasos sanguíneos y los tejidos blandos como los ligamentos, por ejemplo. Otras causas son el alcoholismo, el Parkinson, las enfermedades autoinmunes y la intoxicación por mercurio o plomo”, detalla Fernando Troilo (M.N. 91.741), especialista en cirugía de pierna, tobillo y pie.
El diagnóstico precoz es un desafío para el médico y un importantísimo recurso para la curación del paciente. Troilo explica que el tratamiento se basa en frenar la deformidad y la lesión ósea, mantener en lo posible los huesos en su lugar y las articulaciones en posición.
“La hiperglucemia crónica daña tanto los nervios como los vasos y por ello pueden desarrollarse fracturas por tensión y pasar inadvertidas para el paciente, por lo cual continúa caminando, provocando un daño adicional a los huesos y articulaciones”, explica la médica diabetóloga Susana Fuentes (M.N. 92.619).
Caminar con el pie fracturado, tal como dice la especialista, puede causar fracturas más severas y dislocación de las articulaciones. Los bordes filosos del hueso roto dentro del pie pueden estar en dirección al suelo, lo que aumenta el riesgo de padecer llagas crónicas como resultado de la presión anormal.
El pie de Charcot puede deformar el pie y causar discapacidad en la persona. Por eso, se recomienda que llos diabéticos tomen un cuidado especial de sus pies, porque prevenir es el tratamiento más efectivo contra cualquier enfermedad.
“En el tratamiento se utilizan calzados ortopédicos personalizados, yesos completos, férulas correctivas, plantillas o botas de Charcot que distribuyen la carga en forma adecuada. La cirugía, como en la mayoría de los casos, debe ser la última opción”, opina Troilo.
“La prevención se hace optimizando el control metabólico y evaluando el pie periódicamente”, remarca Fuentes.
Damián sigue dando shows por su cuenta y con la banda. Tiene un compromiso con su vocación de artista y ahora entendió que estar comprometido con el control de su enfermedad significa tener calidad de vida.
