Una buena visión equivale a una calidad de vida mejor para nosotros y nuestras familias. Desde Con Bienestar, resumimos los consejos para prevenir la pérdida de visión, protegerla, preservarla y darle prioridad.
Llevar una dieta sana y equilibrada suele ser el paso crucial para mantener un peso saludable, controlar la obesidad y prevenir enfermedades como la diabetes, que pueden afectar a la salud ocular.
“Ayuda a nuestra salud visual llevar una dieta que incluya frutas cítricas, aceites vegetales, frutos secos, granos enteros, vegetales de hoja verde y pescados de agua fría, realizar ejercicio de manera regular y evitar el tabaquismo, todo lo cual, además, colabora en la prevención de otras enfermedades”, señala Betty Giselle Arteaga (M.N. 112.049) Jefa Baja Visión, Servicio de Oftalmología. Profesora Departamento de Clínica Quirúrgica del Instituto Universitario del Hospital Italiano de Buenos Aires. La experta también aconseja:
- Darle importancia a la detección precoz
Dado que algunas enfermedades oculares —como las cataratas, la maculopatía, el glaucoma y la retinopatía diabética— son más frecuentes con el paso de los años, la detección precoz constituye el mejor sistema de prevención primaria. Los exámenes de agudeza visual, fondo de ojo y toma de presión intraocular, al menos una vez al año, están indicados como parte del examen médico de todos en general, y de los adultos mayores en particular.
- Tener estrategias prácticas para el cuidado de nuestros ojos
A la hora de leer, evitemos forzar la vista con una mala iluminación o cambios bruscos de luz. También debemos establecer un balance entre la iluminación difusa (ambiente) y la localizada, dirigida hacia el texto y no hacia la cara de la persona.
Es importante regular la temperatura ambiental para evitar el aumento de la sequedad ocular (ventiladores, aire acondicionado, calefacción), si se sufre de ojo seco pedirle al médico oftalmólogo que prescriba los lubricantes adecuados para cada caso.
- Cambiar los anteojos recetados cada cierto tiempo
Si no hay dificultades visuales, bastará con un control anual. Los anteojos deteriorados, torcidos o rayados deben reemplazarse. El médico oftalmólogo es el único profesional capacitado para evaluar y prescribir los anteojos necesarios en cada caso.
- Se viene el verano, sí a los anteojos de sol
Con el paso del tiempo, el pigmento disminuye y los ojos están más indefensos ante la luz. Al igual que en la piel, las radiaciones se acumulan, por lo que utilizar anteojos de sol con filtro ultravioleta en las horas de mayor radiación solar es la mejor prevención.
- Sobre la computadora y el celular
Quienes están muchas horas fijando la vista disminuyen su frecuencia de parpadeo. Es importante tener la pantalla al menos a 45 centímetros de distancia. También hay que intentar hacer pausas y observar puntos distantes cada 30 minutos, cerrar los ojos durante algunos segundos para mantener reposo visual y usar los anteojos apropiados.
La pantalla debe estar debajo del horizonte visual. Esto permite que los párpados cubran mayor superficie del globo ocular y disminuya la exposición de la córnea. Así será menor la desecación de la película lagrimal que cubre la córnea y protege de los síntomas del ojo seco.
Es clave darle prioridad a la salud ocular y educar a la familia, a los seres queridos y a la comunidad sobre la importancia de los ojos y la visión.