Al teñirnos es inevitable manchar la zona del cutis más cercana al nacimiento del cabello. Si vamos a la peluquería no hay problema, pero cuando lo hacemos en casa suele ser difícil eliminar esa especie de sombra que queda con los resabios del color que pusimos en el pelo. Por eso, te traemos tres trucos para que te olvides de este problema.
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1- Usá desmaquillante a prueba de agua
Su primera ventaja es que está preparado para ser usado en el rostro (a diferencia de otros líquidos como el quitaesmalte).
Su segundo aspecto positivo es que fue fabricado para remover el maquillaje particularmente difícil. Podés utilizar líquidos, leches o toallas desmaquillantes, que removerán los restos de tintura gracias a los aceites que contienen. Asimismo, no te irritarán la piel. Si las manchas son rebeldes, dejá el producto unos cinco minutos antes de enjuagar.
2- Probá con un exfoliante
En este caso, buscá alguno que tenga micropartículas que remuevan la capa superficial de piel. Masajeá las zonas manchadas con tintura pero hacelo con delicadeza, para no irritarlas.
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3- Intentá con pasta y cepillo de dientes
La pasta de dientes (que no sea a base de gel) será capaz de remover algunas capas de piel y, con ellas, la tintura. Por eso es preciso usarla con cuidado y no muy seguido, al tiempo que hay que cerciorarse de enjuagar bien el área.
