Llega el verano y, con él, las vacaciones. Armamos la valija y salimos para el aeropuerto, ansiando el momento de poner un pie en el destino. Sin embargo, cuando lo hacemos notamos que nuestra piel no está como antes de subirnos al avión (y tampoco llevamos en la valija toda la variedad de productos que tenemos en el baño).
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Para que esto no te pase y tu piel llegue intacta, te traemos cuatro consejos que harán que el cutis no sufra con el ambiente presurizado del avión.
1-Limpieza
Antes que nada tenemos que limpiar nuestro rostro. Pero, sin importar lo que usemos con regularidad, para este caso puntual recomendamos un producto cremoso. ¿Por qué? Pues porque ayudará a evitar la sensación de tirantez del vuelo. Buscá en la góndola aquellos que tienen aceites, para que hidraten bien la piel.
2-Hidratación
En este caso, vamos a colocar un sérum, que penetrará de forma fácil y profunda en la epidermis.
3-Nutrición
Ahora, es el turno de una crema, preferentemente pesada. Así, lograremos que su consistencia (y su efecto nutritivo) dure por muchas horas. Acordate de ponerla en la valija o bolso de mano, para poder aplicártela durante el vuelo cada una hora y media (aproximadamente) y evitar que la piel se reseque.
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4-Protección solar
Sí, aunque vayas a estar dentro de la cabina, te sugerimos colocarte un protector liviano, para estar cuidadas y despreocuparnos de los efectos indeseados del sol.