Esta receta viene a desmentir el mito de que para hacer una buena sopa se necesitan muchos ingredientes. Con solo dos vegetales como protagonistas, es posible crear una preparación cremosa, sabrosa y muy reconfortante.
La clave está en elegir ingredientes de calidad y darles una cocción lenta y paciente, permitiendo que los sabores se concentren y se combinen a la perfección. El resultado es un plato que puede servirse tanto como entrada liviana o como plato principal, acompañado de una rodaja de pan casero que potenciará la experiencia, especialmente en los meses fríos.
La mezcla de zapallo y cebolla logra una sopa naturalmente cremosa, con un sabor intenso y bien definido. No hace falta sumar crema, papa ni otros espesantes: bastará con un poco de sal y un chorrito de aceite de oliva al final para resaltar el sabor puro de los vegetales. Simple, pero deliciosa.
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Receta de sopa cremosa de zapallo y cebolla (para 4 personas)
Ingredientes:
- 500 g de zapallo (puede ser anco, cabutia o el que tengas)
- 1 cebolla grande
Preparación:
- Pelar y cortar en cubos el zapallo. Pelar y cortar en pluma o cubitos la cebolla.
- En una olla grande, colocar la cebolla con un chorrito de aceite o apenas agua. Cocinar a fuego medio hasta que se ablande y empiece a caramelizar levemente.
- Agregar el zapallo y cubrir con agua apenas por encima. Cocinar a fuego bajo con la olla semi tapada durante unos 25 a 30 minutos, hasta que el zapallo esté bien tierno.
- Aplastar con un pisapapas o cuchara de madera para integrar los ingredientes. Si se quiere más cremosa, se puede licuar, pero no es necesario.
- Salpimentar a gusto y servir caliente. Se puede terminar con un chorrito de aceite de oliva o semillas tostadas si se desea.