El durazno, con su dulzura natural y textura jugosa, es una fruta que evoca los días cálidos de verano, pero también puede ser la estrella de las mesas de Año Nuevo. En Argentina, donde los veranos son cálidos y las frutas de carozo abundan en esta temporada, el durazno se transforma en un ingrediente versátil para entradas frescas y elegantes. Su combinación de dulzura y acidez lo convierte en el acompañante perfecto para ingredientes salados.
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Es un fruto que remite a momentos de celebración, en los que los sabores ligeros y las preparaciones creativas marcan la pauta para empezar la noche. Además, su versatilidad permite jugar con texturas y temperaturas, ya sea combinándolo con quesos cremosos, jamones salados o hierbas frescas.
Duraznos a la parrilla con queso de cabra y rúcula (para 2 personas)
Ingredientes:
- 3 duraznos maduros pero firmes.
- 150 g de queso de cabra suave.
- 2 tazas de rúcula fresca.
- 2 cucharadas de miel.
- 1 cucharada de aceite de oliva.
- Sal y pimienta a gusto.
Preparación: cortar los duraznos en mitades y retirar el carozo. Asarlos en una parrilla caliente o plancha por 2-3 minutos de cada lado hasta que estén dorados. Disponerlos sobre un plato, añadir una cucharada de queso de cabra en el centro de cada mitad y decorar con hojas de rúcula. Rocíar con miel y un chorrito de aceite de oliva. Sazonar con sal y pimienta antes de servir.
2. Carpaccio de duraznos con jamón crudo y almendras (para 4 personas)
Ingredientes:
- 4 duraznos.
- 100 g de jamón crudo.
- 50 g de almendras laminadas y tostadas.
- 2 cucharadas de aceto balsámico.
- 1 cucharada de aceite de oliva.
- Hojas de albahaca fresca para decorar.
Preparación: cortar los duraznos en láminas finas y disponerlas en un plato amplio como base. Colocar las fetas de jamón crudo encima de manera decorativa. Espolvorear las almendras laminadas y rociar con una mezcla de aceto balsámico y aceite de oliva. Decorar con hojas de albahaca fresca antes de servir.
3. Ensalada de duraznos, burrata y albahaca (para 4 personas)
Ingredientes:
- 4 duraznos.
- 1 burrata fresca.
- 1 taza de tomates cherry.
- Hojas de albahaca fresca.
- 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen.
- 1 cucharada de vinagre de manzana.
- Sal y pimienta a gusto.
Preparación: cortar los duraznos en gajos y los tomates cherry a la mitad. En un plato, disponer la burrata en el centro y rodearla con los duraznos y los tomates. Decorar con hojas de albahaca y sazonar con sal y pimienta. Rociar con aceite de oliva y vinagre de manzana justo antes de servir para mantener la frescura de los ingredientes.