El ingrediente recomendado para eliminar la acidez de la salsa de tomate no es el azúcar sino el bicarbonato de sodio. Es muy efectivo para neutralizar los ácidos presentes en los tomates, como el cítrico y el málico.
El bicarbonato de sodio actúa de forma química, ya que elimina la acidez y proporciona un sabor más suave a la salsa, a diferencia del azúcar que solo enmascara el sabor sin terminar con los ácidos.
Por qué el bicarbonato de sodio elimina la acidez de la salsa
El bicarbonato de sodio elimina la acidez de la salsa de tomate porque es una sustancia alcalina. Los tomates contienen ácidos naturales, como el cítrico y el málico, que son responsables del sabor agrio. Cuando se añade bicarbonato de sodio a la salsa, ocurre una reacción química, que neutraliza y formando compuestos menos ácidos.
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Esta reacción química es un proceso de neutralización ácido-base. El bicarbonato de sodio (NaHCO₃) reacciona con los ácidos de la salsa para formar dióxido de carbono (CO₂), agua (H₂O) y una sal. El dióxido de carbono se libera en forma de burbujas, lo que puede observarse en la salsa durante la cocción. Este proceso no solo reduce la acidez percibida, sino que también contribuye a mejorar el sabor y la textura de la salsa, haciéndola más suave y menos irritante para el sistema digestivo.
Cómo agregar bicarbonato de sodio a la salsa de tomate, paso a paso
- Preparar la salsa de tomate: cocinarla como lo harías con normalidad, utilizando ingredientes frescos o enlatados según tu receta. Asegurate de que todos los ingredientes estén bien integrados y que la salsa haya alcanzado la consistencia deseada.
- Agregar bicarbonato de sodio: cuando la salsa esté casi lista, añadí una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio. Es aproximadamente 1/4 de cucharadita por cada 500 ml de salsa.
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- Remover bien la mezcla: una vez añadido el bicarbonato de sodio, remové bien la salsa para asegurarte de que se disuelva completamente. Notarás que la mezcla comenzará a burbujear; esto es normal y es el resultado de la reacción química entre el bicarbonato de sodio y los ácidos de la salsa.
- Cocinar a fuego lento: cocinar la salsa a fuego lento durante unos minutos después de añadir el bicarbonato de sodio. Esto permite que el bicarbonato reaccione completamente con los ácidos presentes, neutralizándolos de manera eficaz. Remueve ocasionalmente para evitar que la salsa se pegue al fondo de la olla.
- Probar y ajustar: la salsa para verificar el nivel de acidez. Si aún percibes acidez, puedes añadir una pequeña cantidad adicional de bicarbonato, pero hazlo con moderación para evitar un sabor amargo. Una vez que la salsa tenga el sabor deseado, retírala del fuego y estará lista para servir.