Dentro de los cortes de carne para milanesas, el hígado destaca por ser una opción nutritiva y económica, a solo $1699 el kilo, según la lista oficial de precios del supermercado Coto.
Este corte tiene la particularidad de aportar un buen sabor sin descuidar el bolsillo y aportar nutrientes esenciales. Además, se adapta a la perfección para empanarlo y hacerlo milanesa.
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Milanesa de hígado: la receta fácil y rápido
Ingredientes:
- 1/2 kilo de hígado en milanesa;
- 3 huevos;
- Perejil y ajo;
- 2 cucharadas de mostaza (opcional);
- Pan rallado.
Preparación:
- Pedirle al carnicero que lo corte para milanesa.
- Retirar los bordes del hígado para evitar que se contraiga al cocinar.
- Condimentar las porciones de hígado al gusto.
- Macerar las porciones con mostaza, perejil y ajo.
- Dejar reposar las porciones por 5 minutos para que absorban los sabores.
- Pasar los cortes por huevo batido.
- Cubrir las porciones con pan rallado, asegurando una cobertura uniforme.
- Freír las milanesas en abundante aceite hasta que estén doradas o cocinarlas al horno con un poco de aceite.
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Qué nutrientes aporta comer hígado
- Proteínas de alta calidad: aporta todos los aminoácidos esenciales para el crecimiento y la reparación de tejidos.
- Hierro: contribuye a la formación de hemoglobina y previene la anemia.
- Ácido fólico: es vital para la formación de nuevas células y previene defectos del tubo neural en el embarazo.
- Vitamina B12: esencial para la formación de glóbulos rojos y el funcionamiento del sistema nervioso.
- Riboflavina (B2): ayuda en la producción de energía y en el mantenimiento de la piel y los ojos.
- Niacina (B3): favorece el metabolismo energético y la salud del sistema nervioso.
- Vitamina A: es crucial para la visión, el sistema inmunológico y la salud de la piel.
Cuáles son las contras de comer hígado y los cuidados que se deben tomar
- Consumo moderado: no consumir en exceso debido a su alto contenido de colesterol.
- No comerlo con demasiada frecuencia.
- Higiene y cocción: asegurarse de que esté bien cocido para evitar infecciones bacterianas o parasitarias.
- Frescura: comprar hígado fresco y de buena calidad, preferiblemente de proveedores confiables.
- Almacenamiento: conservarlo adecuadamente en el refrigerador y consumirlo en pocos días para evitar su deterioro.
- Condiciones médicas: consultar a un médico si tenés condiciones de salud que puedan verse afectadas por su consumo, como problemas renales o cardiovasculares.