El caso de Chocolate de Córdoba fue emblemático, tenía tres meses y un peluquero lo despellejó porque "ladraba mucho". Ahora la historia se repite, pero en Río Seco, Tucumán. Una rescatista encontró a una cachorra de 45 días en un basural, hecha un bollito, luchando por su vida. El atancante todavía no fue identificado.
Los vecinos del lugar fueron los que vieron a Angelita sufriendo y llamaron a Andrea para que la ayude. Tenía medio lomo y una patita delantera en carne viva. " Cuando la vi pensé que estaba muerta. Pero aún respiraba y tiritaba por el dolor. Estaba hecha un ovillito esperando la muerte", describió la rescatista en redes sociales. La perrita resistió el viaje en auto de 20 kilómetros hasta la localidad de Aguilares donde la atendió un veterinario.
"Estaba visiblemente cortada con un cuchillo. Prolijamente. De manera macabra. No puedo describir la precisión de los cortes. Esto no lo hicieron niños. Esto fue hecho por un sádico que no tiene corazón"
Con un poco más de un mes de vida, esta perrita soportó tres horas de quirófano y que le cosan 25 centímetros de su piel. Pero con todo eso, igual sigue peleando. Andrea se la llevó a su casa, donde deberá recibir atención las 24 horas. Todavía no saben si se salvará su pata.
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