Organizaciones sociales convocaron a movilizarse y cortar el puente Pueyrredón, de la localidad de Avellaneda, al iniciarse los actos por el undécimo aniversario de los asesinatos de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, quienes murieron el 26 de junio de 2002.
Los manifestantes interrumpieron por la tarde del martes la circulación vehicular frente a la estación ferroviaria de Avellaneda, que ahora lleva los nombres de los militantes asesinados en 2002 durante una represión policial.
Durante la madrugada los manifestantes realizan una vigilia que terminará a las 11, hora en la que convocan a interrumpir el tránsito en el puente que une la Capital con Avellaneda. También habrá actos en Rosario, Córdoba y San Miguel de Tucumán, entre otras ciudades del país.
Las organizaciones sociales y de derechos humanos denunciaron que "los responsables políticos de la Masacre de Avellaneda continúan impunes" y advirtieron que funcionarios vuelven a aparecen en las listas para candidatos a legisladores en las próximas elecciones, según DyN. Entre otros, citaron a Alfredo Atanasof, jefe de Gabinete del ex presidente Eduardo Duhalde; Felipe Solá, gobernador bonaerense al momento de la masacre; y a Juan José Alvarez, secretario de Seguridad durante el gobierno duhaldista.
Kosteki y Santillán, que tenían 21 y 25 años, y militaban en la Coordinadora Aníbal Verón, fueron asesinados el 26 de junio de 2002 durante una protesta en reclamo de planes sociales. Además de ellos, otras 33 personas sufrieron heridas por disparos de efectivos policiales.
El 9 de enero de 2006 la Justicia condenó a los policías Alfredo Fanchiotti y Alejandro Acosta a prisión perpetua por los asesinatos. La violenta represión policial provocó una crisis en el gobierno de Duhalde, que adelantó las elecciones presidenciales.
