El mal olor corporal suele combatirse con desodorantes industriales o perfumes, pero muchos de estos productos contienen alcohol y otros compuestos que pueden irritar la piel o dejar manchas en la ropa.
Frente a este problema, en los últimos años se volvió tendencia el uso de un ingrediente natural, económico y que es probable que tengas en casa: el bicarbonato de sodio.
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Este es conocido por su poder para neutralizar olores, y aplicado en pequeñas cantidades sobre la piel limpia puede prevenir la formación de malos olores durante todo el día. A diferencia de los desodorantes tradicionales, no bloquea la transpiración sino que evita que las bacterias que causan el olor se desarrollen.
Su uso es muy simple: basta con colocar una pizca de bicarbonato en la axila seca y esparcirla con suavidad. También puede mezclarse con unas gotas de agua o aceite de coco para formar una pasta más suave. Lo mejor es que no deja marcas blancas, no mancha la ropa y su efecto dura varias horas.
Cómo usar bicarbonato como desodorante natural
- Aplicalo con la piel seca por completo para evitar irritaciones.
- Usá poca cantidad: con una pizca alcanza.
- Si tenés piel sensible, mezclalo con maicena o con aceite de coco para suavizar su efecto.
- No lo uses justo después de depilarte o afeitarte.
- Guardalo en un frasco hermético lejos de la humedad para mantener su potencia.
