El color de uñas es un detalle que suele ser cuidado por distintas razones. Según la elección, hay distintas interpretaciones, además de impactar de forma directa en cómo se ven las manos.
Una de las tendencias actuales descarta el uso de colores evidentes, como el rojo o el blanco. En cambio, apuesta por uno más sutil y que, en algunos casos, puede ir de la mano con el tono de piel de algunas personas. Se trata del nude.
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Carolina Herrera, una de las referentes del nude en las uñas
De acuerdo con un reportaje de ELLE, Carolina Herrera, diseñadora, es una de las personalidades más influyentes de la moda que tiende a lucir las uñas de sus manos con nude. Esta tendencia resuena fuerte en Europa, donde en la actualidad están en primavera, y también durante el otoño sudamericano.
Dentro de los beneficios estéticos que resaltan en la publicación están:
- El color estiliza las manos.
- Realza el bronceado, en caso de venir de unas vacaciones llenas de sol (o si está en los planes).
- Genera sensación de limpieza y sofisticación, algo que no muchos colores propician.
Algo interesante dentro de este color es que ofrece una amplia variedad de tonalidades. Por tanto, puede ajustarse según la piel de cada persona. En el caso de Carolina Herrera, ella suele preferir un tono beige muy claro, similar al de sus uñas naturales.

Junto con esta tendencia, al momento de elegir un color para las uñas se recomienda basarse en el tono de piel. En términos generales, esta es la referencia:
- Piel clara: colores suaves como nude rosado, pasteles, rojo cereza o burdeos.
- Piel media u oliva: corales, rosas intensos, rojos clásicos, tonos terracota.
- Piel morena u oscura: colores vibrantes como fucsia, naranja, dorado, azul eléctrico, verde esmeralda.