La ciudad bonaerense de Salto, situada a 160 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires, atraviesa uno de sus peores desastres naturales de las últimas décadas. Tras la caída de 400 milímetros en 48 horas de lluvias ininterrumpidas, el temporal dejó más de 4 mil evacuados y autoevacuados, según fuentes oficiales del Gobierno bonaerense.
Camilo Alessandro, secretario y coordinación general de Gobierno, expresó: “El dolor es inmenso, hay familias que lo han perdido todo”. Mientras comienza a bajar el agua, el municipio garantizó colchones y frazadas para 1600 vecinos.
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El intendente Ricardo Alessandro admitió que la situación es “muy difícil” y advirtió que el agua no baja con la velocidad que esperaban. Las lluvias provocaron el anegamiento de barrios enteros, cortes de rutas y el colapso de los servicios de emergencia.
“Tenemos miles de personas evacuadas, tanto en los centros habilitados como aquellas que han debido autoevacuarse”, señalaron las autoridades locales, que desplegaron un operativo de emergencia sin precedentes en el distrito.
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El intendente Ricardo Alessandro, visiblemente conmocionado, dijo: “En 20 años como intendente no he visto una crecida como esta. Les pido a los vecinos máxima solidaridad”.
Desde el Gobierno bonaerense confirmaron que están enviando suministros y desplegando recursos de asistencia.

“Llovió muchísimo en muy poco tiempo”
Hernán Carbonel, periodista, escritor y vecino de Salto, habló con TN sobre la crítica situación que atraviesa el distrito tras el fuerte temporal del fin de semana. “Día largo, difícil, así que te voy a empezar a contar”, dijo, al comenzar su relato sobre el fenómeno que mantiene en vilo a toda la comunidad.
“Llovió muchísimo en muy poco tiempo”, subrayó. Y explicó que, aunque en la ciudad están acostumbrados a este tipo de episodios, el nivel de intensidad y rapidez con la que se desarrolló la tormenta fue inusual.
En zonas cercanas al río, los vecinos ya saben cómo actuar cuando hay pronósticos de tormentas fuertes. “Tienen conocimiento de que cuando llueve mucho, ya saben que tienen que prepararse: subir los muebles, sacarlos de sus casas, etcétera”. Pero esta vez, aseguró, “no dio tiempo a prepararse”.
“Tengo una sobrina que llegó a tener el agua a la cintura, y estoy hablando de una persona de un metro ochenta”.
Carbonel recordó un texto propio, publicado años atrás en un libro, titulado El agua, donde escribió una frase que hoy cobra nueva fuerza: “Salto se convirtió en una Venecia pobre”.
Carbonel destacó con énfasis el espíritu solidario que atraviesa a la comunidad: “La solidaridad de la gente es impresionante. Gente ofreciendo camionetas, lanchas, kayak, poniéndose al servicio del que lo necesita, lo vi. Saliendo a meterse en el agua, poniendo en peligro su vida, porque también lo vi, para ayudar al que sea. Eso es impresionante”.
“Hoy estuve dos o tres horas ayudando en el centro de atención principal, porque hay ocho centros de evacuados, en clubes, escuelas, y recibiendo donaciones, esperando a la gente para que venga a pedir lo que necesita”, contó.

En tanto, la Dirección de Bromatología municipal informó que ya se están llevando a cabo tareas de saneamiento y desinfección en las zonas más afectadas. “Nuestro principal objetivo es asegurar condiciones sanitarias adecuadas para el retorno seguro de los vecinos a sus hogares”, señalaron.