Al planificar las vacaciones, una de las opciones más cómodas es viajar en avión: más allá de la tranquilidad que otorga el medio de transporte en cuanto a la seguridad, lo cierto es que recorre largas distancias en un corto tiempo y prácticamente no tiene limitaciones físicas, además de ofrecer comodidades como la comida, bebida y WiFi gratuito.
Sin embargo, los precios de los boletos suelen ser, a menudo, un impedimento para muchas personas que quieren veranear en algún destino turístico. Exceptuando promociones, los asientos son más caros que en el caso de trasladarse en micro o en tren: por ello, hay que estar atento a los descuentos, usualmente escondidos en la letra chica, que brindan las compañías.
En ese sentido, existe la posibilidad de conocer dos lugares por el precio de uno que muy poca gente conoce. Aquel beneficio está enmarcado en una estrategia conocida como “programa de stopover”, vinculado a ofertas que permiten a los pasajeros llevar a cabo largas escalas, casi como si se tratase de una doble oportunidad.
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Cuáles son los beneficios que ofrecen las aerolíneas con el programa stopover
El tiempo de la escala, por supuesto, varía dependiendo de la empresa contratada, pero es de al menos 24 horas. Por ejemplo, Singapore Airlines da tours gratuitos en el aeropuerto; Emirates propone una espera de hasta tres días en Dubai, con hospedaje incluido; y Qatar Airways te da hoteles de entre cuatro y cinco estrellas a apenas 14 dólares la noche, con visa gratuita para más de 80 nacionalidades.
Entre otras alternativas interesantes, figura Turkish Airlines, que entrega una parada de hasta dos días en Estambul, con alojamiento y viajes gratis dentro del país otomano; KLM, que deja parar en Ámsterdam con atracciones a valores irrisorios; Air Canada, que permite hacer escalas de hasta 96 horas en Toronto, Montreal o Vancouver; y TAP Portugal, que ofrece una estadía en Oporto o Lisboa durante siete días sin costo adicional.
Una iniciativa interesante es la que Icelandair empezó a implementar hace algunos años: si el viajero toma un vuelo transatlántico, lo autorizan a quedarse una semana en Islandia sin costo adicional. Es clave tener en cuenta que, en todas las opciones, es necesario hacer la selección del pasaje bajo esa modalidad, ya que no puede agregarse como extra de manera posterior.
Para reservar los servicios, es clave ingresar al sitio web de la firma y buscar la sección “Stopover”, desde la parte “Gestión de reserva”. Allí, se debe averiguar si todos los datos completados están en condiciones y la compra se finaliza en la página del prestador.
Cómo surgió el stopover y por qué se popularizó en Europa en los 50
El programa comenzó a surgir a partir de la década del ‘50, una vez finalizada la Segunda Guerra Mundial, cuando se popularizaron los viajes en aviones comerciales. El sistema era relativamente simple debido a que, además de que les daba a los pasajeros la oportunidad de recorrer, se podían repostar los aviones y efectuar mantenimiento durante varias horas.
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Una de las primeras en avanzar con el proyecto en Europa fue la propia KLM, impulsada por las políticas liberales del gobierno por aquel entonces, ya que la aerolínea era propiedad del Estado. Con el tiempo, la siguieron las demás, siempre con las cámaras de turismo asociadas gracias al éxito para la industria que representó la medida.
