Aunque la leche de vaca sigue siendo la más popular según las ventas al por menor, las leches 100% vegetales son tendencia mundial. Son apreciadas por su bajo contenido graso, por la variedad de nutrientes que aportan a nuestro cuerpo y por su fácil y rápida digestión.
Estas alternativas de origen vegetal suelen elaborarse poniendo en remojo la legumbre, el fruto seco, el grano u otro ingrediente principal y, a continuación, prensando y colando el líquido, o “leche”. Muchas personas las prefieren porque quieren o necesitan evitar los lácteos, pero algunas las eligen porque creen que son más saludables que la leche de vaca.
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Cómo hacer leche de coco
Elaborada a partir de la pulpa rallada de los cocos, es naturalmente dulce y tiene aproximadamente la mitad de calorías que la leche entera, pero tiene pocas proteínas (0,5 gramos por taza), y cinco gramos de grasas saturadas —aproximadamente la misma cantidad que la leche entera—, sin grasas insaturadas saludables.
Los cocos son altamente nutritivos y ricos en fibra, vitaminas C, E, B1, B3, B5 y B6. Además contienen minerales como el hierro, selenio, sodio, calcio, magnesio y fósforo. A diferencia de la leche de vaca, la leche de coco no tiene lactosa, así que quienes sufren de intolerancia pueden usarla como sustituto.
Para hacerla primero debes verter el coco rallado en un vaso para batir o en la licuadora junto con el agua tibia y deja reposar 1 minuto. Bate o licua un par de minutos para hacer que la fibra del coco desprenda la grasita. Coloca la bolsa para bebida vegetal o tela fina sobre un bowl y vierte la leche coco. Aprieta hasta que logres drenar la mayor cantidad de leche posible.
NOTA: No deseches los residuos del coco, puedes hacer otras recetas como galletas, bizcochos o puedes utilizarlo para hacer harina de coco.
Por qué es buena la leche de almendras
Esta bebida con sabor a nuez es la leche vegetal más popular. Una taza de la versión sin endulzar tiene solo 37 calorías —aproximadamente una cuarta parte de la cantidad de la leche entera— y un 96 por ciento menos de grasas saturadas.
Qué beneficios tiene la leche de soja
Enriquecida con calcio y vitaminas A y D, es la única leche no láctea comparable a la de vaca en cuanto a equilibrio de nutrientes, según las directrices dietéticas. Una taza tiene seis gramos de proteínas, 105 calorías y aproximadamente un 89 por ciento menos de grasas saturadas que la leche entera. Tiene una consistencia similar a la de la leche de vaca y es una fuente natural de potasio.
