La testosterona, la principal hormona para el desarrollo muscular y la libido, desempeña un papel crucial en varias funciones corporales. Sin embargo, los niveles bajos de testosterona pueden tener importantes consecuencias para la salud que se extienden más allá del gimnasio y el dormitorio.
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“La testosterona es la hormona androgénica madre que existe dentro de los seres humanos tanto en hombres como en mujeres. En el caso de los hombres, se libera en los testículos y en las glándulas suprarrenales, y en el de las mujeres también en las cápsulas suprarrenales y en la capa externa de los ovarios”, explica el médico español, doctor Antonio Hernández, experto en Biología Funcional y Molecular.
Aquí hay cinco señales de que la testosterona puede estar demasiado baja en los hombres:
- Disminución de la libido. Los hombres con T baja suelen tener falta de deseo sexual.
- Pérdida muscular: cuando los niveles de testosterona disminuyen, el cuerpo puede pasar a un estado catabólico, descomponiendo el tejido muscular en lugar de desarrollarlo.
- Niebla cerebral: los niveles hormonales inadecuados pueden afectar la función óptima de las células cerebrales, lo que resulta en desafíos cognitivos con el pensamiento y la memoria.
- Pérdida del cabello: la testosterona es vital para el crecimiento del vello facial y corporal. Las personas con niveles bajos de T pueden experimentar pérdida y adelgazamiento del cabello, y no solo en el cuero cabelludo.
- Fatiga y poca energía: puede haber desmotivación, las actividades habituales suelen ser más agotadoras y la recuperación es más lenta después del esfuerzo físico.
Cómo aumentar los niveles de testosterona
Como existen diferentes situaciones que pueden resultar en niveles bajos de testosterona, el Dr. Gerardo Eusebio Ortiz Lara, urólogo español, recomienda que lo mejor es que todo hombre asista al médico a partir de los 40 años, momento en el que puede empezar a bajar esta hormona a niveles desde 0.4% hasta un 4% de manera anual. Debido a esto, en la cultura de salud de todo hombre se debería realizar un examen de testosterona, así como la revisión de próstata.
Tanto si se detectan síntomas relacionados a la disminución de la testosterona, así como si se han cumplido los 40 años, el paciente deberá asistir de preferencia con un andrólogo, que es una subespecialidad de la urología y que se enfoca en la salud sexual y reproductiva del hombre.
Una vez que se ha determinado, mediante estudios, la disminución en esta hormona, se deberá buscar la causa de esto y, en caso de que se hayan detectado factores de riesgo que la puedan afectar, se deberán tratar esperando que los niveles se normalicen.
