Milán es una de las regiones de Italia más afectadas por la emergencia del nuevo coronavirus. Sus hospitales desbordan y la atención del personal de salud es maratónica. Debido a esto, el hospital Niguarda implementó la equinoterapia, un trabajo con caballos para aliviar el estrés emocional de los médicos y enfermeras al cuidado de pacientes afectados por COVID-19.
Ya van más de dos meses que los trabajadores de la salud, los médicos, las enfermeras y todos los operadores están trabajando incansablemente para hacer frente a la dramática emergencia de salud que afecta gravemente a toda la humanidad y con mayor saña a Italia, en especial, a las regiones del norte del país, entre ellas a la región de la Lombardía.
Los altos niveles de contagio del virus, los riesgos de contagio para uno mismo y para otros, el aumento de casos positivos y muertes en pacientes y entre los propios médicos, enfermeras y trabajadores de la salud, contribuyen gradualmente a determinar una sensación generalizada de alarma y miedo.
Todo esto genera trastornos emocionales como ansiedad, inquietud, cambios en el estado anímico, llanto y trastornos del sueño, entre otros. Síntomas que inevitablemente pueden afectar la labor que cada uno debe desempeñar.
A esto, se suma una enorme sensación de impotencia ante el sufrimiento de todos y la muerte de pacientes críticos, y sobre todo, una relación con los pacientes que es absolutamente diferente del pasado.
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La comunicación ahora está mediada por la distancia, con máscaras, trajes de buceo y diferentes dispositivos de protección. Los médicos y las enfermeras se encuentran con la profunda soledad de los pacientes detrás de las máscaras, que no pueden ser consolados directamente por sus familiares sino, siempre que sea posible, solo a través de un dispositivo tecnológico.
"Muchos sufren de una falta de relación cercana con los pacientes que están tratando, ya sea por la gravedad de la enfermedad o porque están 'enjaulados' en trajes de astronauta que no les permiten el contacto al que estaban acostumbrados", explica la psicóloga del centro, Michela Riceputi.
Por esta razón, el hospital Niguarda, de la ciudad de Milán, lleva a cabo esta novedosa idea para tratar de reducir y contener el nivel de estrés emocional del personal involucrado. Lo pueden hacer en el mismo predio del hospital ya que cuenta con una gran escuela de equitación en el interior.
Centro V. Di Capua, es su nombre, y es uno de los primeros de ese país en incorporar la terapia asistida con caballos en el tratamiento de niños con trastornos psíquicos, cognitivos y emocionales.
Es así que Adelina, Júpiter, Birbante, Jamaica, Fly Lady, Winter y Nilo, siete hermosos caballos, esperan cada día al grupo de médicos y enfermeras para ofrecerles un tiempo y un espacio para ellos, en el que pueden relajarse y recargarse. Estar al aire libre, en contacto con animales y siguiendo experiencias guiadas positivas.
En tres semanas, más de 50 médicos y enfermeras, antes o después del turno en la sala, pasaron tiempo en esta 'granja' para relajarse y recargar energías entre pasto, huertos y árboles frutales.
