El adenocarcinoma pancreático es una de las neoplasias malignas humanas más letales, con la tasa de mortalidad más alta de todos los cánceres. Las estadísticas afirman que el 95% de los pacientes mueren dentro de los cinco años posteriores a la detección de la enfermedad debido a su diagnóstico tardío.
A raíz de esto, en un evento se buscó co-crear enfoques innovadores en las fronteras del conocimiento y la tecnología, en el campo de la detección temprana, la cirugía y los sistemas de dispositivos post-cirugía para mitigar la adversidad del cáncer de páncreas.
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Se trata de la primera maratón de invención co-creativa en cáncer de páncreas que reunió a innovadores de todos los orígenes para diseñar soluciones a uno de los problemas más apremiantes en el campo del cáncer. El evento fue organizado por la ONG Emprear y Weinvent Innovation Lab y dio la bienvenida a millennials e innovadores senior de todo el mundo, “desde estudiantes hasta PHDs en cualquier campo relacionado con el cáncer”.
El Pancreas Innovation Kick-off fue llevado a cabo en las oficinas de Microsoft Argentina y en el Centro Universitario Vicente López. El equipo ganador, conformado por médicos, tecnólogos y estudiantes avanzados de medicina, recibió el Premio Weinvent que le permitirá a los ganadores llevar el proyecto al mercado global, de la mano de un experimentado equipo de emprendedores.
El invento presentado, fue muy bien ponderado por el equipo de cirujanos de páncreas más prestigioso de América Latina, encabezado por el Dr. Pedro Ferraina (MN 35215), fue un implante para tratar la “fístula postoperatoria en la pancreatectomía cefálica”.
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Ferraina detalló a CONBIENESTAR: “La cirugía para los tumores de páncreas consiste en una cirugía muy agresiva, que afortunadamente en los últimos años ha disminuido muchísimo la mortalidad. Sin embargo, lo que sigue persistiendo alto es el grado de complicaciones del postoperatorio, lo que puede demorar la externación del paciente”.
El invento, que llegaría al mercado luego de pasar las pruebas clínicas, reducirá la morbilidad derivada de esta cirugía que ronda el 20%, mejorará el pronóstico y reducirá los riesgos quirúrgicos, evitando prolongar la internación de los pacientes así como la necesidad de nuevos procedimientos invasivos para corregir la fístula.
Los miembros del equipo ganador son la Dra. María Eugenia Báez, las estudiantes avanzadas de medicina Eugenia Litrenta y Tatiana Rodriguez y el tecnólogo Cesar Wigand, quienes recibieron el apoyo del Dr. Mario Nahmod quien actuó como mentor.
La doctora Báez explicó en diálogo con CONBIENESTAR: “Consiste en un implante que resuelve la unión entre el páncreas y el intestino, tratando de que esa fístula no se forme. La idea principal es no hacer suturas. Fue un trabajo interdisciplinario”.
