El príncipe Carlos parece estar en plena campaña para impulsar el yoga en Reino Unido. En una aparición pública aseguró que su fundación financiará la práctica de esta disciplina entre los presos más jóvenes, con el objetivo de llevarles “esperanza y positividad”. Asimismo, propuso que la actividad sea incorporada al servicio de salud público.
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“Desde hace cientos de años, millones de personas experimentaron cómo el yoga mejora sus vidas. El desarrollo de esta práctica como terapia se basa en pruebas científicas y es un excelente ejemplo de cómo puede contribuir a la salud y al bienestar”, dijo el príncipe en una conferencia sobre el tema. En este sentido, afirmó: “El yoga no solo beneficia a quien lo prueba, también supone una gran herramienta para otros que puedan necesitarla”.
Ante esta propuesta, no podemos evitar preguntarnos si Meghan Markle tuvo algo que ver en la actitud de su suegro. Es que se sabe que la duquesa hace yoga y meditación desde pequeña, e incluso se levantó durante el embarazo a las 4.30 de la mañana para hacer algunas posturas. De todas formas, Camila Parker Bowles también es una aficionada a esta actividad. La duquesa de Cornualles la considera beneficiosa, sobre todo a medida que se empieza a envejecer.
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El príncipe de Gales fue un poco más allá y sugirió además que el yoga debería ser incorporado al sistema de salud público inglés. “Esto no solo ayudará a los individuos sino que conservará recursos de salud caros y preciados para quienes realmente lo necesiten”, completó.
