A los 15 meses, Tilly Lockey contrajo meningococemia, también conocida como púrpura fulminante, y los médicos dijeron que no iba a cumplir dos años. Le amputaron los brazos y los dedos de los pies y necesitó diez transfusiones de sangre, pero logró sobrevivir sorprendiendo a todos.
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La joven ya tiene 13 años y adoptó como una responsabilidad concientizar acerca de las consecuencias que puede tener la meningitis. Gracias a su compromiso y a la búsqueda constante de su mamá, la última Navidad recibió unas prótesis biónicas que cambiaron su vida.
Con la precisión que tienen los brazos biónicos, Tilly ahora es capaz de realizar muchas tareas que antes se le dificultaban. Puede pintar, jugar juegos de mesa, levantarle los pulgares a sus amigos ¡y hasta maquillarse!. Sus tutoriales tuvieron una gran respuesta en las redes sociales y captaron la atención de la prensa.
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En los videos se la puede ver colocándose máscara para pestañas, sombras, rubores y labial sin ningún esfuerzo ni ayuda. “Los brazos le resultan de suma utilidad y a todos parecen gustarle sus contenidos. Cuando le diagnosticaron meningitis nos dijeron que no sobreviviría, así que ver todo lo que logró es increíble y estoy orgullosa”, aseguró su mamá, Sarah, al sitio SWNS.
Este no es el primer par de brazos que recibe la nena inglesa. De hecho, se convirtió en embajadora de una compañía que diseña este tipo de prótesis en el país, Openbionics. Su labor es probar la tecnología antes que otros chicos, para evaluarla. Es que desde los 3 años que usa dispositivos electrónicos, aunque con funciones básicas.
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Estas prótesis fueron diseñadas a medida para ella con una impresora 3D. Son las primeras de este tipo aprobadas en Inglaterra y permiten realizar movimientos precisos y delicados. Se mueven mediante sensores y tienen las mismas funciones que los brazos. “Me encanta poder sostener dos cosas al mismo tiempo. Sé que parece sencillo y probablemente mucha gente lo de por sentado, pero para mí es maravilloso tener un libro en una mano y una lapicera en la otra. Es genial para estudiar”, detalló la chica. Además, le encanta cómo lucen y está orgullosa de usarlas.
Acerca de esta tecnología, su mamá precisó: “Puede utilizar los brazos como cualquier otra persona emplea sus manos. Ahora se da cuenta todo lo que puede hacer con ellos y los usa todos los días”.
