Esta tarde, dos personas fueron arrestadas tras la detonación de un artefacto explosivo casero dentro del Cementerio de Recoleta. Una de ellas fue una mujer de 33 años, que resultó herida de gravedad cuando manipulaba ese elemento. Con 109 años de diferencia, el personaje que vincula los dos ataques es Ramón Falcón, un exjefe policial que murió tras sufrir un atentado por parte de un militante anarquista.
Falcón se desempeñaba como jefe de la Policía Federal en el momento en el que fue asesinado junto a su secretario, el joven de 20 años Juan Lartigau. "Lo mataron el 13 de noviembre, saliendo del Cementerio. Por eso, en estas fechas, suelen aparecer pintadas anarquistas. El 14 fue su entierro", explicó a Bella Tarde el historiador Eduardo Lazzari.
// Explotó un artefacto casero en el Cementerio de la Recoleta: hay dos detenidos
El autor del atentado contra la vida de Falcón fue el anarquista ucraniano Simón Radowitzky. Cuando Falcón y Lartigau cruzaban con su carruaje Quintana y Callao, a pocos metros del Cementerio de Recoleta, el atacante le lanzó el artefacto que explotó junto a las piernas del jefe policial.
Su gestión al frente de la Federal fue controvertida. El mismo año en el que fue asesinado, en mayo, ordenó una brutal represión contra una manifestación de anarquistas conocida como la "Semana Roja". Su actuación dejó 11 muertos y más de 100 heridos.
"Fue tal el impacto emocional y político del atentado a Falcón, que cuando Radowitzky fue preso y lo condenan a perpetua, 20 años después fue indultado por Hipólito Yrigoyen. Ese fue uno de los elementos que aglutinó a los conservadores y que no se lo dejaron pasar cuando le hicieron el golpe de Estado", recordó el historiador.
Frente al ataque de esta tarde, Lazzari comentó que siempre recuerda que hay pintadas "pero no hechos así". "Hay un monumento a Falcón que está ubicado frente a La Biela, restaurado hace poco tiempo, que siempre tuvo acciones vandálicas, pero nunca de estas características", aseguró.
