Cristina Kirchner viajará a Cuba por cuarta vez en el año para visitar a su hija Florencia, que se somete a un tratamiento médico en ese país. La expresidenta fue autorizada por los jueces del Tribunal Oral Federal 2, que la juzgan en el expediente por supuestas irregularidades en la obra pública de Santa Cruz.
La precandidata a vicepresidenta de Alberto Fernández partirá hacia Cuba el jueves 22 de agosto y regresará una semana después.
Los magistrados Andrés Basso y Rodrigo Giménez Uriburu estuvieron de acuerdo en permitir que la exjefa de Estado abandone el país para visitar a su hija y de esta forma desestimaron el pedido del fiscal Diego Luciani, que se había opuesto a la autorización. Jorge Gorini no votó porque está de licencia.
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Cristina Kirchner es juzgada por el supuesto direccionamiento de la obra pública en favor del empresario Lázaro Báez, detenido en el penal de Ezeiza. En esta causa también están involucrados el exministro de Planificación, Julio De Vido, y el exsecretario de Obras Públicas, José López.
Los magistrados argumentaron que Cristina Kirchner "siempre estuvo a derecho" y que regresó a tiempo cada vez que solicitó ir al exterior. De hecho, el viaje coincide con una audiencia del juicio (la del lunes 26 de agosto) pero remarcaron que en esta etapa del proceso no es necesaria su presencia.
De acuerdo a los informes presentados a la Justicia, Florencia tiene síndrome purpúrico en estudio; polineuropatía sensitiva desmienilizante de etiología desconocida; amenorrea en estudio; bajo peso corporal y linfedema ligero de miembros inferiores de etiología no precisada. Debido a este complejo cuadro, Cristina Kirchner ya viajó en tres oportunidades para visitar a su hija.
Según confirmó Camilo Vaca Narvaja, expareja de Florencia, la joven no está internada sino que se realiza un tratamiento ambulatorio.
