En el Congreso nacional, senadores y diputados reclamaron que Martín Menem, titular de la Cámara Baja, envíe al Senado la ley que regula los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU), aprobada la semana pasada por Diputados, para que el cuerpo que preside Victoria Villarruel pueda definir si insiste con su sanción original o acepta las modificaciones.
Desde el bloque de Unión por la Patria, encabezado por José Mayans, sospechan que Menem demora el giro con el objetivo de postergar el debate en la Cámara Alta que esperaban llevar adelante los representantes de las provincias.
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En el Senado, el debate podría comenzar en la Comisión de Asuntos Constitucionales, presidida por la cordobesa Alejandra Vigo, encargada de emitir dictamen sobre el proyecto.
Desde Unión por la Patria no descartan impulsar una sesión la próxima semana si Martín Menem finalmente remite la sanción. De concretarse, el tratamiento ocurriría a pocos días de las elecciones nacionales, aunque todo indica que, si el envío se retrasa, la discusión se postergará hasta después del 26 de octubre.

El diputado de Democracia para Siempre Fernando Carbajal le dijo a TN: “Estamos preocupados porque nos enteramos de esta situación cuando supimos que por este motivo el Senado no pudo sesionar esta semana, ya que el presidente de la Cámara retuvo el expediente y esto es extremadamente grave. Esto es un capítulo más de los diferentes episodios que estamos teniendo, la inasistencia de los ministros a la interpelación, son nuevos pasos en la degradación institucional de un Gobierno que está jugando al borde del sistema”.
Carbajal dejó planteada la necesidad de rediscutir la conducción de la Cámara tras el recambio legislativo del próximo 10 de diciembre.
Los argumentos de Diputados
Desde la presidencia de la Cámara Baja descartan maniobras políticas y le aclararon a TN que la sanción se produjo, el pasado miércoles 8 de octubre, en una extensa reunión que finalizó en la madrugada del jueves después de debatirse emplazamientos de comisiones, interpelaciones de funcionarios y cuestiones de privilegio. Esto generó que el personal administrativo del Cuerpo haya comenzado con el trabajo de ordenamiento horas después de la sesión. Aclarando que el viernes 10 de octubre fue feriado nacional.
La actividad administrativa parlamentaria se retomó el lunes, preparando, además, los pedidos de emplazamientos a diferentes comisiones y el martes se organizó las convocatorias a las sesiones especiales para las fallidas interpelaciones de los ministros Luis Caputo, Mario Lugones y a la secretaria general Karina Milei.
Entienden desde las oficinas de Martin Menem que hay una demora y la misma se va a saldar a la brevedad.
El Reglamento de la Cámara de Diputados no determina un plazo de giro a la otra Cámara o al Poder Ejecutivo, tras una sanción. La comunicación de la sanción de una ley entre las cámaras del Congreso Nacional es un proceso donde no existe un plazo fijo establecido para esta comunicación, ya que depende de los procedimientos internos de cada Cámara y la coordinación entre ellas.
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La sanción de Diputados

El pasado 8 de octubre la Cámara de Diputados aprobó la Reforma a la Ley que regula la utilización de los DNU. Sin embargo, y aun cuando ya contaba con la media sanción del Senado, no pudo convertirse en ley. En la votación en particular -puntualmente, en el artículo 3-, la oposición no logró alcanzar la mayoría absoluta por apenas dos votos y debe regresar a la Cámara Alta. En ese artículo se establecía un plazo de 90 días para que el Congreso se pronuncie sobre su validez.
La mayoría absoluta en Diputados es de 129 votos para que quede firme. En cambio, la votación en general fue contundente: obtuvo 140 votos positivos.
La Ley se sancionó en el 2006 y fue impulsada por la exsenadora Cristina Kirchner.