El Gobierno busca sumar a la UCR al acuerdo con el PRO en la provincia de Buenos Aires y apunta a desligar a Mauricio Macri de las negociaciones. El Ejecutivo quiere cerrar una alianza con el radicalismo bonaerense y apunta a desplazar al expresidente de la mesa de diálogo. “No estamos hablando con él y tampoco va a estar en las reuniones”, expresan en Nación.
La Casa Rosada asegura que sus interlocutores tienen diálogo hace meses con el senador nacional de la UCR Maximiliano Abad para acercar posiciones con las intendencias que maneja el radicalismo bonaerense. Los cercanos al legislador sostienen que hubo contactos con el oficialismo, pero que no tuvieron relación con lo electoral. El encargado del armado de La Libertad Avanza en la Provincia es el subsecretario de Integración Socio Urbana, Sebastián Pareja.
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La mesa política de Balcarce 50 insiste con el plan de que los dirigentes aliados se integren a las filas de La Libertad Avanza sin una firma institucional entre partidos y pone como condición que se plieguen a su agenda. Quieren estirar las negociaciones hasta días previos al cierre de listas para fijar una mayor cantidad de lugares para los candidatos libertarios.
Javier Milei les bajó línea a los cercanos para que intenten que haya un acuerdo amplio con todos los sectores opositores al peronismo en el territorio bonaerense, pero la decisión final la tiene la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. La hermana del Presidente está a cargo de las negociaciones junto al armador nacional, el subsecretario de Gestión Institucional, Eduardo “Lule” Menem.
El Gobierno mantiene la postura de negociar el armado electoral con los dirigentes del PRO sin la intervención de Macri. Aplica para los contactos con los diputados del PRO Cristian Ritondo y Diego Santilli, y con los intendentes Guillermo Montenegro (Mar del Plata), Ramón Lanús (San Isidro) y Pablo Petrecca (Junín), entre otros.
El Ejecutivo busca aplicar la misma estrategia con los gobernadores Ignacio Torres (Chubut) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos). Se trata del tipo de acuerdo que firmó La Libertad Avanza en la provincia de Chaco con la fuerza del mandatario Leandro Zdero para las elecciones del 11 de mayo. “No queremos ganar las provincias, sino sumar más manos que voten las leyes”, expresan en Nación.
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La forma jurídica de las alianzas es parte de un debate interno que tienen los equipos de Karina Milei y el asesor presidencial Santiago Caputo. Mientras que el sector que responde a la hermana del presidente busca establecer el armado territorial en todos los distritos, los cercanos al consultor mantienen la postura de no competir en las provincias sin un candidato instalado y con poca intención de voto.
Las tensiones se trasladan al armado bonaerense, donde encabezará la lista el diputado oficialista José Luis Espert. En el oficialismo preparan un esquema de campaña con intervenciones del presidente en el territorio, como en el congreso libertario que estaba previsto para esta semana y se postergó sin fecha de reprogramación.
