El asesinato de otro policía de la Ciudad en la Provincia de Buenos Aires volvió a generar una disputa entre las administraciones de Jorge Macri y Axel Kicillof. El jefe de Gobierno porteño le hizo este miércoles un fuerte reclamo al gobernador bonaerense, a quien le pidió que “no mire para otro lado” ante los numerosos hechos de inseguridad registrados en la Provincia en los últimos meses.
“Volvemos a pedirle al gobierno de la Provincia que no mire para el otro lado con este tema. Estamos a disposición para trabajar de manera conjunta, como lo hacemos siempre, tomando las decisiones que hagan falta. Por ejemplo, como ya lo decidimos, ofrecerles a los policías el uso del chaleco antibala en ese trayecto de ir y volver a sus casas”, dijo Macri en relación al crimen del policía porteño Brian Coria, asesinado el martes por la noche en un intento de robo en Castelar.
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En conferencia de prensa, el jefe de Gobierno consideró: “Uno de nuestros policías fue asesinado en la provincia de Buenos Aires, yendo y viniendo de su lugar de trabajo. Dedican todo el día a cuidarnos,en la Ciudad de Buenos Aires. Enfrentan al delito, detienen delincuentes, se ponen en riesgo por nosotros, y los matan volviendo a su casa”.
Antes de la conferencia, el mandatario porteño se había expresado sobre el caso en redes sociales: “Lamento profundamente el fallecimiento del Oficial Coria, asesinado brutalmente en Castelar. Mis condolencias a su familia y a sus compañeros de la Policía de la Ciudad”.
En la misma línea, el ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolff, expresó en redes sociales que “toda la familia de la Policía y el Ministerio está de luto” por el asesinato. El funcionario estimó que el 70% de los 18.000 policías porteños viven en la Provincia, una situación que, en su opinión, los expone a mayores riesgos.
“Nos están cagando a tiros. Está descontrolada la Provincia. Hoy mataron a uno, pero ya hubo otro tiroteo en La Matanza. La matemática muestra que está aumentando el delito exponencialmente. Lamentablemente, el tiempo me da la razón”, argumentó el ministro porteño, en declaraciones a CNN Radio.
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“A veces en la chicana política se dice que Wolff se mete en otra jurisdicción. Pero no es otra jurisdicción. El 50% de las personas que están en la Ciudad vienen del Conurbano, y los que están en la Ciudad van al Conurbano. La jurisdicción no se termina en la General Paz”, agregó.
Y sentenció: “¿Con qué me chicanean? ‘A ustedes se les escapan los presos’, dicen. Ustedes me ponen un micrófono y yo hablo de los problemas que tenemos. Yo me hago cargo de los presos de la Ciudad de Buenos Aires. En lo que va del año tuvimos 11 enfrentamientos de policías. La pregunta es, ¿ustedes se hacen cargo de que a los bonaerenses los están cagando a tiros?”.
Hace meses que Wolff y Javier Alonso, el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, mantienen una fuerte disputa por la inseguridad en ambas jurisdicciones. De los últimos 14 policías porteños asesinados, 13 murieron en territorio bonaerense, según las cifras oficiales del Gobierno porteño.
Frente a los reproches de los últimos días, Alonso respondió recordando la reciente fuga de presos en las comisarías porteñas: “Irrita escuchar al Jefe de Gobierno de la Ciudad que quiere subirnos a un ring ridículo hablando de un conurbano descontrolado. Lo que está descontrolada es la Ciudad”.
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El ministro de Gobierno y mano derecha de Kicillof, Carlos Bianco, comparó a la Ciudad con un “municipio” y dijo que los funcionarios de PRO solo buscan aplicar “chicanas” cuando tienen un grave problema con la fuga de presos.
“Los invitamos a discutir cuando quieran. Ahora, chicanas para no hacerse cargo de los propios problemas de seguridad que tiene la Ciudad... Nosotros trabajamos de manera seria, sin chicanas, y permanentemente discutiendo los temas”, aseguró en Radio Futurock.
Según Bianco, las declaraciones de los funcionarios porteños se dan para “encubrir su propia impericia”. “La Ciudad tiene grandes problemas de inseguridad, obviamente, a pesar de tener recursos infinitamente más grandes que la Provincia. La cantidad de policías porteños como federales que tienen en un territorio de poco más de 200 kilómetros cuadrados, en relación tanto con la población como con la superficie de la Provincia, con los recursos, es infinitamente más grande. Lo que tienen que explicar es (cómo), con esa cantidad de recursos para solo controlar la seguridad de un municipio llamémoslo, porque es más parecido a un municipio que a una provincia, todavía tienen los problemas de seguridad que tienen… Eso es lo que deben explicar”.
El ministro de Kicillof se respaldó en los números de homicidios que brindó el Ministerio de Seguridad de la Nación, y aseguró que la Provincia de Buenos Aires volvió a bajar la tasa de crímenes cada 100.000 habitantes: “No significa que no tengamos inconvenientes y hechos delictivos, cosa que es obvia y evidente, de la misma forma que hay también en la Ciudad. Pero me parece que muchas veces en la Ciudad critican a la Provincia y lo utilizan para tapar los propios problemas”, consideró.
No obstante, Bianco cerró con una chicana: “Les diría a las autoridades de la Ciudad que les podemos explicar cómo hacer para que no se les escapen los presos. Es algo que les viene pasando bastante seguido, que no es muy difícil (evitar), sobre todo en una jurisdicción que cuenta con tantos recursos. Tienen que construir más alcaidías y cárceles, lo que está haciendo la Provincia, para que estén mejor resguardadas y en mejores condiciones las personas privadas de la libertad. De esa forma van a evitar que se les escapen los presos casi semanalmente”.
