Lejos de morigerar el ritmo, el Gobierno siguió a paso firme con su plan de ajuste sobre el gasto público. Así queda reflejado en las estimaciones presupuestarias del primer semestre del año, que mostraron que para sostener el superávit de las cuentas públicas el Ejecutivo debió ajustar los gastos en obras públicas, subsidios y transferencias a organismos públicos, como empresas estatales.
La información surge del último informe realizado por la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP), que describió que en el acumulado de los primeros seis meses de 2025, el gasto público total se redujo en 2,1%.
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Si se observa el detalle, los sectores que explican el resultado son las transferencias de capital -incluyen inversiones como obras publicas-, que cayeron 64,8% en el primer semestre en relación con el mismo período de 2024.
Le siguen las transferencias corrientes, como subsidios, que se redujeron en un 21,1%, mientras que también se realizaron recortes en transferencias corrientes al sector privado por un 17,8%, y remuneraciones (salarios), que se achicaron un 9%.
Pero más allá de las partidas que sufrieron ajustes, algunas sí reportaron subas. En concreto, las transferencias corrientes a provincias crecieron un 95,7% en el acumulado semestral. A su vez, se incrementaron la inversión financiera (65,2%) y la inversión real directa (56%).
Qué pasó con los gastos y los ingresos públicos en el primer semestre del año
La Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP) describió que la Administración Pública Nacional tuvo en la primera mitad del 2025 un crecimiento del 19,4% de sus ingresos actualizados por inflación. “Sin embargo, si se deduce el impacto del giro de utilidades del BCRA de $11,9 billones que se efectivizó en abril, la variación es cercana a cero (-0,6 interanual ajustado por IPC)”, advirtieron.
Entre los factores que contribuyeron al aumento de los ingresos figuran las Contribuciones a la Seguridad Social (+25,4%), la mejora del IVA (+3,7%) y el incremento del impuesto a los Créditos y Débitos (+6,1%). También se observó una suba en los recursos adquiridos a través de los Derechos de Importación y Tasa Estadísticas (+14,6%), como consecuencia del aumento de las importaciones.
Por el lado de las erogaciones, durante el primer semestre el gasto total se contrajo 2%. Pero si se descuenta el pago de intereses, se reportó un aumento de 2,9%.
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“Esta evolución se explica principalmente por prestaciones de la Seguridad Social (+21,7%), determinado en parte por el efecto positivo de la nueva fórmula de actualización de los haberes y de la baja base de comparación, afectada por el rezago de la anterior fórmula de actualización vigente hasta marzo del 2024, y por la fuerte aceleración inflacionaria entre fines de 2023 y marzo de 2024″, indicaron en ASAP.
En tanto, precisaron que el aumento de las transferencias corrientes a provincias (+95,7%) se explicó fundamentalmente por el cumplimiento del fallo a favor de la Ciudad de Buenos Aires, ya que sin esos pagos, el concepto mostraría una reducción del 1,2%.
En relación con el ajuste sobre el gasto en remuneraciones, en ASAP señalaron que, a través de esta partida, se puede dar cuenta “de la caída real de los salarios públicos como de la reducción de la planta ocupada”.