El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, reconoció este domingo que los alimentos que están por fuera de los programas oficiales tuvieron incrementos por encima del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y señaló que la situación se produjo como consecuencia de la fuerte alza en las materias primas a nivel internacional en medio de la pandemia por coronavirus.
El funcionario enfatizó que la suba de los valores internacionales de la soja, el trigo, el maíz y el arroz, por ejemplo, “genera tensiones sobre la cadena industrial, porque les achica los márgenes” y resaltó que Precios Cuidados y Precios Máximos permitieron “una evolución diferente a los productos frescos, porque terminarán por debajo de 20 puntos por debajo del promedio de la inflación”.
“Estamos conversando con los distintos sectores de la cadena alimenticia una salida gradual, controlada de Precios Máximos y a la vez ampliar Precios Cuidados para que los incrementos que se den no tengan afectación de la canasta básica y no impacten en el bolsillo de los argentinos, porque necesitamos en 2021 que el salario real se incremente para generar el círculo virtuoso de crecimiento”, dijo el ministro en diálogo con FM Milenium.
Kulfas enfatizó que por esa razón, los ajustes en alimentos para los próximos meses deben “ser acotados para que no terminen comiendo el aumento de salarios”. Consultado sobre la pérdida del poder adquisitivo durante este año, el funcionario aseguró los sueldos “de convenio terminarán con una evolución similar a la inflación.
En ese orden, planteó que se están analizando estructuras de costos de las empresas alimenticias para determinar cuáles serán las alzas que el Gobierno autorizará desde enero próximo. También aseguró que negocian con los frigoríficos de exportación para trazar un compromiso para todo 2021 a fin de ofrecer “cortes de carne de calidad de demanda popular con precios accesibles”.
La carne vacuna fue de los alimentos frescos que más se incrementó en los últimos dos meses. Ante la situación, el Gobierno pactó con los frigoríficos exportadores que se vendan tres cortes parrilleros (asado, vacío y matambre) con descuentos de hasta 25% en los días previos a Nochebuena y Navidad.
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Este domingo, Kulfas manifestó que “ese fue el objetivo de cortísimo plazo” y que “se trabaja más a mediano plazo para garantizar carne de calidad a precios accesibles durante 2021″. Resaltó que la idea del presidente Alberto Fernández apunta a reactivar un compromiso vigente en 2007, como lo comentó hace menos de un mes el propio jefe del Estado, con un esquema similar al ideado por José Mujica en Uruguay, conocido como “el asado de Pepe” por el cual la industria garantizaba cortes populares al mercado interno y exportaba el resto sin restricciones.
“Queremos que haya una oferta cortes de consumo masivo, de excelente calidad y a un precio razonable, sobre todo pensando en los ingresos medios y más humildes. A a la vez generar una mayor oferta exportable. También estamos pensando en que algunos cortes premium se paguen al precio de exportación, porque hay un sector de la sociedad que sí lo puede hacer”, abundó el ministro.
Desafío por delante
Por su parte, el director del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), Marco Lavagna, dijo que “la inflación sigue siendo uno de los problemas centrales de la economía argentina” y planteó que el desafío que enfrenta el Gobierno es lograr “una tendencia a que año tras año sea un poco más baja”.
“Ya venimos de muchos años de inflación elevada, lo que hace que la resolución del problema no se pueda pensar en un año, y es imposible suponer que se alcance una inflación de un dígito en menos de dos o tres años. Hay una tendencia que viene a la baja, pasar del 54% (en 2019) a lo que termine dando este año, que será bastante más bajo el que viene, es una confirmación de que esa tendencia se rompió”, agregó el titular del Indec en una entrevista con el diario Perfil.
Lavagna comentó que en la primera mitad de este año se vio una desaceleración muy fuerte, con niveles inflacionarios que estaban en el 1,5% mensual en promedio, mientras en esta segunda parte vemos unos niveles más altos, lo que implica que se aceleró respecto de lo que era la primera mitad, pero en términos de la tendencia, sigue a la baja”. Y apuntó que la clave para 2021 está en poder lograr “que siga la tendencia a la baja” en un contexto en el que el Gobierno contempla la posibilidad de ir liberando gradualmente las tarifas de servicios públicos, entre otras cuestiones.