Anthony “Tony” Soprano amaba los cannoli, ese postre italiano típico de Sicilia que compraba en el Caffé Palermo de Pequeña Italia porque seguramente le hacían recordar a la cuna de la mafia que luego se instaló en Nueva York y Nueva Jersey y de la que formaba parte.
Tony Soprano, el jefe de la familia mafiosa DiMeo de Nueva Jersey en Los Soprano, interpretado por el inolvidable James Gandolfini, tenía predilección por los cannoli. Ese postre consiste en una masa ovalada frita, que lleva vino, y se rellena en el momento de comer con una crema en base a ricota.
Como es una palabra en italiano, el singular del postre es cannolo, mientras si hablamos de más de uno –aunque sea difícil comer dos-, serán cannoli. Según las distintas regiones de Italia, hay diferentes versiones del cannolo, aunque los sicilianos aseguran que su receta es la original y auténtica.
Desde Italia, los cannoli recorrieron el mundo y en Estados Unidos se convirtieron en uno de los dulces favoritos, tanto a la hora del postre como del café. Tanto es así, que en esa país se instituyó el Día Mundial del cannolo, que se celebra el 16 de junio, y no en Italia. En nuestro país se consiguen cannoli rellenos con helado, crema pastelera o dulce de leche, ideales para el paladar local.
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Esta receta siciliana es del libro Puro Dulce, del chef Donato De Santis, ideal para el gusto del adorable mafioso de la televisión.
Ingredientes para la masa para los cannoli
- 750 g de harina 0000
- 5 g de azúcar
- 1 pizca de sal
- ½ clara
- 1 cucharadita de vino marsala
- ½ cucharadita de vino blanco
- 5 g de grasa derretida
Ingredientes para el relleno
- 750 g de ricota
- 150 g de azúcar impalpable
- 30 g de chips de chocolate
- Ralladura de naranja
Modo de preparación
Paso 1: Para el relleno, procesar la ricota con el azúcar impalpable. Debe lograrse una crema lisa y homogénea. Agregar los chips de chocolate y la ralladura de naranja e integrar todos los ingredientes. Reservar.
Paso 2: Colocar los ingredientes secos en un bol y luego ir agregando los líquidos. Mezclar y amasar hasta lograr una masa homogénea. Taparla con papel film y guardarla en la heladera durante dos horas.
Paso 3: Retirar la masa de la heladera y estirarla en la mesada hasta que quede bien finita. Después cortar 12 círculos con un cortante redondo de 8 cm de diámetro. Con un palo de amasar, rodar sobre cada círculo hasta darle una forma ovalada.
Paso 4: Enrollar cada óvalo alrededor de un tubo para hacer cannoli (o de un molde cilíndrico, se consiguen en reposterías) y cerrarlos presionando la parte media de la masa sobre la otra, dejando los extremos libres. Presionar con los dedos, para que no se despegue.
Paso 5: Para freír los cannoli, sumergirlos completamente en una sartén con aceite de girasol durante poco más de un minuto, hasta que la masa tome color. Retirarlos, colocarlos sobre papel absorbente y retirarles los moldes o tubos.
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Paso 6: Recién cuando están fríos y van a ser servidos, rellenarlos con la crema. Decorarlos con los chips de chocolate, cerezas, cáscaras de naranja o pistachos.
Los cannoli, tal como los elegía Tony Soprano en la famosa pastelería de Nueva York, son ideales tanto para la hora del postre como para acompañar el té o el café con leche del desayuno o la merienda. Como les dicen ahora en Estados Unidos y también en algunos locales porteños, son all-day-cannoli.
