Este fin de semana, un influencer de TikTok fue detenido por hacerse pasar por un médico en un hospital de Johannesburgo, Sudáfrica. Matthew Lani, de 27 años, había logrado acumular más de 300 mil seguidores en dicha red social fingiendo ser un doctor.
Se había vestido con una mascarilla quirúrgica y un estetoscopio alrededor del cuello. Según informó el departamento de salud de Gauteng, “anteriormente había ingresado a las mismas instalaciones para hacer contenido engañoso bajo el pretexto de que era un médico calificado”.
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El momento de la detención fue filmado por testigos y compartido en las redes sociales, donde el video se hizo viral rápidamente. Lani intentó escapar por la ventana de un baño pero lo volvieron a agarrar y lo entregaron a la policía.
De acuerdo a lo que informó la BBC, el joven aseguró que se había recibido de médico en la Universidad de Witwatersrand en Johannesburgo, aunque, tras una investigación, descubrieron que nunca terminó sus estudios ni tampoco había obtenido el título.
Además, también se confirmó que el tiktoker intentó engañar a la policía diciendo que su nombre real era Dr. Sanele Zingelwa, un verdadero médico interno de segundo año en el Hospital Terciario Provincial de Tembisa. Según la BBC, Zingelwa presentó cargos contra Lani por fraude.
Desde TikTok, le dieron de baja la cuenta aunque él se creó una nueva y subió un video en donde niega todo lo que había pasado. En este contexto, sus seguidores no esperaron para dejar sus comentarios: “Está todo armado”, “He estado esperando este día desde hace mucho tiempo”, “Lo siguiente que hará será en vivo mañana”.
Una joven fingió tener cáncer para recaudar 40.000 dólares y estafó a más de 400 personas
Madison Russo, una joven universitaria de 20 años, fue detenida después de que se descubriera que había mentido que tenía cáncer en sus redes sociales para pedir donaciones y ganar dinero fácil.
En su momento, su historia se había hecho viral y llegó a acumular miles de seguidores. En su cuenta de TikTok, iba contando cómo avanzaba su enfermedad y todos los detalles de su “tratamiento”. De esta manera, llegó a estar a más de 400 personas y reunir más de 40 mil dólares.
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Todo comenzó el 2 de febrero de 2022 cuando Russo, oriunda de Iowa (Estados Unidos), aseguró que le habían diagnosticado cáncer de páncreas en etapa 2 y que las probabilidades de sobrevivir durante los próximos cinco años eran del 10%, ya que, supuestamente, el tumor había crecido lo suficiente como para que implique una cirugía de alto riesgo.
Madison salió a contar su historia en las redes sociales, en los medios locales y hasta en podcasts de la facultad. En la mayoría de sus videos, habla sobre lo que sentía acerca de su “enfermedad” y se sinceraba con sus seguidores: “Fue una semana llena de acontecimientos y, en el mundo del cáncer, los acontecimientos no son buenos”.
A pesar de que sostuvo la mentira durante bastante tiempo, la verdad comenzó a salir a la luz cuando sus seguidores empezaron a notar “irregularidades” en sus argumentos, como en los tubos que se pegaba al cuerpo para simular que se estaba sometiendo a una quimioterapia.
En enero de este año, la joven estadounidense fue detenida y acusada por estafa y por robar fotos de pacientes reales para hacer que su historia fuera verosímil. Además, la policía realizó un allanamiento en su casa, donde encontraron pelucas, porta sueros y vendas.
Por otra parte, se descubrió que, durante la mentira, había aceptado plata de 439 donantes que eran seguidores de las redes sociales, fundaciones de lucha contra el cáncer e instituciones escolares. A pesar del fraude, el dinero fue devuelto a dichas personas.
De acuerdo a lo informado por el medio KWQC, la causa podría enviarla hasta 10 años a la cárcel, aunque podrá quedar libre siempre y cuando cumpla con tres años de libertad condicional y pague una multa de 1.300 dólares.
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Durante el juicio, Madison admitió que no mintió por plata o por fama: “No hice esto para llamar la atención. Hice esto en un intento de intentar que mi familia volviera a estar unida”, afirmó y aceptó que su comportamiento fue “irracional e inmaduro”.
