Una chica se arriesgó a hacerse un tatuaje misterioso sin conocer al artista. Para esto, tuvo que meter la pierna en el agujero de un cubículo donde se encontraba el tatuador anónimo.
La aventura de Tahlia Pritchard, de Australia, se hizo viral en TikTok, pero no le gustó el resultado: en el tobillo, le dibujaron una calavera y un ave posada sobre esta.
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El primer video alcanzó 3.2 de reproducciones. Tahlia asistió al Festival of Dangerous Ideas (Festival de ideas peligrosas) o FODI en Sídney, descrito en su la web como un festival disruptivo que “cuestiona los deseos y creencias más arraigados”.
“Poniendo mi fe ciega en alguien que nunca he visto para que me haga un tatuaje misterioso”, subtituló la publicación en su perfil, @tahliapritch. Firma unos documentos de autorización y consentimiento y se acuesta en la camilla.
“No conocí al artista en absoluto ni le especifiqué nada, y él nunca me había visto. Le pregunté si podía poner la pierna porque estaba dispuesta a ‘sacrificar’ un tobillo”, detalló en una entrevista con Newsweek.
Tahlia le contó al medio que experimentó “una montaña de emociones” después de ver el resultado. No le dio mucha importancia al principio por lo acelerado del momento, pero luego “buscó información para quitárselo con láser”.
La imagen que hicieron en su tobillo derecho recibió muchos comentarios negativos. “Yo lloraría”, lamentó una joven. “No quiero ser dramática, pero yo hubiese agendado una cita para removerlo con láser al mismo tiempo de haberlo visto”, comentó una y Tahlia le respondió que había estado googleando sobre esto cuando llegó a su casa.
Muchos pensaron que la calavera y el ave fueron hechos por dos personas diferentes, ya que la primera no quedó tan bien trabajada como se esperaba. “Me niego a creer que la calavera y el pájaro hayan sido hechos por el mismo artista”, señaló una internauta.
En un nuevo posteo, anunció que nombró Bert a la calavera y que probablemente lo eliminaría con láser. Insistió en que no había pagado por el tatuaje, sí se lo hizo la misma persona y que no tenía ninguna imagen en el tobillo antes de ese evento, aunque muchos insinuaron que así fue.
A pesar del revuelo por el dibujo, Tahlia hizo una última publicación en la que confirmó que no va a borrárselo: “¿Qué tal si lo dejo exactamente como está? Siempre será una historia divertida para contar”.
