Hay algunas recomendaciones habituales para crear contraseñas fuertes. Los especialistas en ciberseguridad aconsejan usar letras mayúsculas, minúsculas, símbolos y números. Además, evitar las combinaciones fáciles de adivinar y eludir la repetición de claves en las diferentes plataformas.
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Otro buen consejo para conseguir passwords robustos es usar tres palabras consecutivas. El tip es cortesía del Centro Nacional de Seguridad Cibernética del Reino Unido, quienes enfatizaron que la elección de los términos debe ser azarosa. En caso contrario, la contraseña podría ser fácilmente descifrada.
“Tres palabras al azar debería ser suficiente para evitar que los ciberdelincuentes descubran tu contraseña, pero lo suficientemente para que la recuerdes”, nota al respecto el sitio Phone Arena.
“123456″ vuelve a ser la contraseña más usada en el 2024
Un informe de PC Gamer reúne los 200 passwords más usados de 2024 y el primero en la lista vuelve a ser “12346″, tanto para las cuentas personales como para las corporativas. Esa combinación también fue la más elegida en el 2020 y el 2022.
Además de ser la más usada, es la más fácil de adivinar para los piratas informáticos. De acuerdo a NordPass, cualquier ciberdelincuente y sistema diseñado para descifrar claves demorará menos de 1 segundo para averiguarla.
3 consejos (poco habituales) para elegir contraseñas fuertes
Tal como señalamos, es usual la recomendación que apunta al empleo de combinaciones complejas que incluyan números, símbolos y letras en mayúsculas y minúsculas. Ahora bien: una buena idea es obviar la mayúscula en el comienzo del password, porque es un comportamiento esperable y, en tanto, más fácil de adivinar. Lo mismo ocurre con el número “1″ al final de la contraseña.
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Otro aspecto a considerar: el hecho de que una clave parezca difícil, no implica que lo sea realmente. Un buen ejemplo es la cadena de letras “ADGJMPTW” que a primera vista resulta compleja, pero que en verdad es la consecución del 2 al 9 en el teclado numérico de un teléfono.
Nunca uses información identificable, como el nombre de tu equipo de fútbol favorito o los nombres de tus hijos. Esto hace que tu contraseña sea mucho más fácil de descifrar. ¿Por qué? En muchos casos, esos datos están disponible en forma pública, por ejemplo en las redes sociales de los usuarios que son apuntados por los atacantes.
