Muy probablemente, cualquiera que haya realizado alguna compra online, en algún momento de la transacción, se topó con un requisito supuestamente obligatorio para completar la operación: la solicitud por parte del vendedor de mostrar o enviar una foto del DNI.
Ya sea en una plataforma de comercio electrónico, como en una página web de un negocio, incluso cuando la persona que hace la entrega del producto, cada vez es más común que nos pidan esa prueba de identidad para finalizar una compra. Pero aunque parezca que revelar los datos que figuran al frente del documento no conlleva ningún peligro, el plástico contiene cierta información que no debería compartirse.
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El número de trámite, que figura en la última línea del frente de la tarjeta DNI es uno de esos datos sensibles que deben permanecer en poder solo del titular. El código que aparece en la esquina derecha inferior, llamado PDF417, tampoco debería compartirse.
Para qué sirve y por qué es importante no compartir el número de trámite y el código PDF417 del DNI
El número de trámite comenzó a tomar relevancia en la población general durante la pandemia: había que ingresarlo en el formulario de excepción para poder circular.
La importancia de este número de 11 dígitos reside en que sirve para realizar trámites en ANSES y/o para completar la solicitud de renuncia de subsidios.
En cuando al código PDF417, que se asemeja a un QR y a un código de barras, contiene información biográfica y biométrica del titular del documento. Por estas razones, no es conveniente revelarlos, hacerlos públicos ni compartirlos por redes sociales ni con nadie.
Para los casos en los que un vendedor de confianza o en un comercio solicitan mostrar el DNI para confirmar la identidad, existe un truco.
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Daniel Monastersky, abogado y especialista en ciberseguridad y protección de datos, explicó en su cuenta de Twitter/X que en los casos en los que te piden que envíes una foto del documento por email o WhatsApp, si no hay otra alternativa, lo podés hacer pero borrando o tapando el número de trámite y el código PDF417.
Monastersky explicó que no compartir esa información es importante para mantener seguros nuestros datos y se complementa con la iniciativa que lleva adelante desde hace dos años llamada Sumate al POS.
Campaña #sumatealPOS
La campaña tiene por objetivo fomentar un cambio cultural que permita a los consumidores tener un mayor control sobre sus transacciones al momento de pagar en establecimientos. Para lograr esto, la iniciativa propone acercar la máquina de POS al cliente y evitar que tengan que entregar sus tarjetas de crédito o débito a los empleados y perderlas de vista por unos minutos. Esto reduce significativamente la posibilidad de robo o clonación de los datos de la tarjeta.
Al llevar el POS a la mesa, los clientes pueden verificar el monto a pagar y confirmar que la transacción se realizó de manera segura.
Esta propuesta, que la semana pasada tuvo dictamen a favor en la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Senadores, como parte de un proyecto de ley de pago seguro, no solo beneficia a los clientes, sino también a los establecimientos comerciales. Al promover la seguridad de la información y la protección de los datos personales, se aumenta la confianza y fidelidad de los clientes, lo que tiene un impacto positivo en la reputación y las ventas.
