Estos días, James Cameron está enfocado en Avatar: The Way of Water, que recientemente llegó a los cines con el desafío de suceder a la exitosa primera parte de 2009. En ese contexto, el cineasta habló de otra de sus películas emblemáticas, Terminator, y reconoció que en una eventual secuela se enfocaría más en la inteligencia artificial que en “robots malos y enloquecidos”.
La inteligencia artificial, en la mira de James Cameron
Cameron fue entrevistado en el podcast Smartless y una de las temáticas que abordó fue la posible continuación de la franquicia Terminator, cuya primera película fue estrenada en el año 1984.
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El nacido en Canadá comentó que tuvo conversaciones para un nuevo film de Terminator y explicó que, en caso de encarar ese proyecto, prefiere alejarse de las máquinas de matar que se vieron hasta ahora en las seis películas para centrarse en la inteligencia artificial.
“Si tuviera que hacer otra película de Terminator y tal vez tratar de lanzar esa franquicia nuevamente, lo cual está en discusión, pero no se ha decidido nada, lo haría mucho más sobre el lado de la IA que los malos robots enloquecidos”, dijo el director de 68 años. Cameron no especificó si le gustaría dirigir una futura entrega o si la entregará a otro cineasta.
Siguiendo a Business Insider, los comentarios del hombre detrás de éxitos de taquilla como Avatar y Titanic surgen en medio de la creciente popularidad de ChatGPT, un chatbot de IA de la empresa OpenAI que asombra por sus capacidades para realizar tareas en forma autónoma, por ejemplo escribir.
El recorrido de Terminator y el posible abordaje de la inteligencia artificial
Cameron retomó la franquicia con Terminator 2: Judgment Day en 1991, y con Terminator: Dark Fate de 2019, para la cual produjo y concibió la historia. Esa última película fue dirigida por el cineasta de Deadpool, Tim Miller, y reunió a las estrellas originales del filme ochentoso, Arnold Schwarzenegger y Linda Hamilton.
Dark Fate fracasó en términos financieros. Con un presupuesto de producción de 185 millones de dólares, recaudó 261 millones a nivel global.
“La franquicia ha tenido un camino difícil en los cines durante algún tiempo, y cualquier película futura podría enfrentar una batalla cuesta arriba para atraer audiencias”, dice BI. Quizá, el camino para retomar el éxito de 1984 sea cambiar el eje: ya no robots asesinos, sino inteligencias artificiales en su interacción con la humanidad.
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Aquel es un terreno fértil, con muchas aristas para explorar, conforme los avances en IA generan ilusiones por sus beneficios así como temores por los usos no deseados de una tecnología que se autonomiza mientras los humanos la entrenan.