Puede que el nombre Markus Persson no sea conocido en todo el mundo. Sin embargo, es el creador de uno de los videojuegos más exitosos de la historia: el Minecraft, que le hizo ganar 2,5 mil millones de dólares. Luego de vender su empresa a Microsoft, no volvió a trabajar en la industria del entretenimiento. Sin embargo, fue noticia muchas veces por protagonizar polémicas en las redes sociales: desde apoyar teorías conspirativas hasta hacer comentarios racistas y homofóbicos.
Nacido el 1° de junio de 1979 en Estocolmo, la capital de Suecia, Markus Persson empezó a programar con tan solo siete años en una computadora Commodore 128. Apenas un año después, creó su primer videojuego. Esa se convirtió en su pasión y nunca la abandonó. A sus 25 años, empezó a trabajar para King, la misma empresa que lanzaría en 2012 el Candy Crush. Tras cinco años, abandonó la compañía para centrarse en sus propios proyectos.
En una época en la que los grandes desarrolladores competían por sacar videojuegos con los mejores gráficos, Persson decidió hacer lo contrario: una imagen muy básica, con píxeles gigantescos. “Me di cuenta de que un juego simple y dinámico tenía un gran potencial para convertirse en un gran juego”, explicó.
Minecraft, el videojuego récord que Microsoft compró por 2,5 mil millones de dólares
El sueco, que se hace llamar Notch en la comunidad de cibernautas, desarrolló en 2009 el juego Minecraft y lo lanzó al público en general el 17 de mayo de ese año. Sin embargo, se trataba de una versión incompleta: los usuarios pagaban por un early access (acceso temprano), para poder jugar mientras se iba actualizando. Eso le sirvió también para que los usuarios le dieran recomendaciones y le dijeran qué problemas debía resolver. La primera version estable fue publicada el 11 de noviembre de 2011.
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Para enero de 2011, tenía un millón de ventas. Seis meses después, esa cifra ascendió a 10 millones. Se convirtió en el juego más vendido de la historia, superando a Tetris. Ahora ya lleva más de 300 millones de copias vendidas y se ubica en la cima de la industria, muy por encima del mítico GTA V (Grand Theft Auto 5), que lo sigue bastante desde atrás con 215 millones de unidades comercializadas.
El éxito fue rotundo. Tres años después, en 2014, vendió su empresa, Mojang, a Microsoft a cambio de 2.500 millones de dólares. Entonces, dejó de participar en la toma de decisiones y se despidió de su creación.
Teorías conspirativas y otras polémicas en Twitter
“Q es real. No crean a los medios de comunicación”, escribió el 2 de marzo de 2019 en su cuenta oficial de Twitter, donde tiene más de 3,7 millones de seguidores. En específico, se refería a QAnon, una teoría conspirativa ultraderechista que comenzó un usuario anónimo que aseguraba estar metido en el gobierno estadounidense y tener pruebas y documentos importantes.
En sus hilos rebuscados y repletos de misterio, sugería que Barack Obama, Hillary Clinton, el empresario George Soros y otras personas planeaban un golpe de Estado, mientras que Donald Trump, entonces presidente de Estados Unidos, intentaba combatirlo.
Aunque en un principio esas absurdas versiones se limitaron a internet, luego trascendieron la pantalla: hubo una pequeña marcha de centenares de conspiracionistas por Washington, mientras que varios carteles con referencia a “Q” empezaron a aparecer durante los actos de campaña de Trump. La primera gran figura de relevancia que apoyó esta teoría fue justamente Markus Persson.
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No fue esa su primera polémica en Twitter: en junio de 2017, apoyó el “Día del Orgullo Heterosexual”, un concepto impulsado por aquellos conservadores que se oponían al Día del Orgullo LGBT. “Si estás en contra del concepto del Día del Orgullo Heterosexual, sos un completo idiota y merecés un disparo”, escribió.
Al año siguiente, cuando un usuario le preguntó si amaba a los judíos, lanzó una controversial respuesta: “Si se nos permitiera discutir las diferencias de coeficiente intelectual entre poblaciones, habría menos teorías de conspiración”.
