Un tribunal en Madrid, España, condenó a la dueña de un locutorio por usar versiones pirateadas de Windows 7 y Office. Dos de las ocho computadoras en aquel establecimiento, ubicado en Vallecas, contaban con ediciones truchas de esos softwares, según se comprobó en las investigaciones policiales.
La justicia española no se había pronunciado sobre una cuestión similar anteriormente, y por eso este fallo marca un antecedente fundamental para la industria del software.
La sala dictó su primera sentencia, determinando que se trata de un delito contra la propiedad intelectual. De este modo, el juzgado confirma una condena de seis meses en la cárcel, el pago de una multa de 3.600 euros y la correspondiente indemnización a Microsoft, la empresa que comercializa los mencionados programas.
La decisión que ahora se divulga tuvo un recorrido extenso, que se estiró a lo largo de varios años de investigaciones y sentencias provisionales. De acuerdo a Cadena Ser, la Policía Nacional inspeccionó el locutorio en noviembre de 2017 e identificó los dispositivos que no contaban con la licencia requerida. La sentencia luego pasó por la Audiencia Provincial, y más tarde llegó a manos del Tribunal Supremo.
Los jueces que entienden en la causa señalaron que el acto viola las normativas establecidas en la reforma legal realizada en 2015 en España, donde se cataloga como un delito contra la propiedad intelectual cualquier modalidad que explote económicamente productos sin licencia.
Según se lee en la sentencia, la dueña del local ha lucrado con “ordenadores y programas informáticos sin la licencia de utilización que permite su explotación comercial”; a sabiendas de que esos productos “requieren de licencias que permitan su utilización, al tratarse de obras documentadas que son creación del espíritu con un contenido original y protegido por el ordenamiento”.
Windows 7 en desuso
Lanzado en 2009, Windows 7 no tiene actualizaciones de seguridad desde comienzos del año pasado. En la ocasión, Microsoft advirtió que las computadoras que sigan empleado ese sistema operativo son más vulnerables a eventuales ataques informáticos.
En ese marco, aquellos que deseen estar protegidos deben pasarse a la edición más reciente del S.O., Windows 10. En aquel entonces, más del 25% de las computadoras a nivel mundial tenían instalado Windows 7.
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Tal como contamos en aquella oportunidad, aquellos que todavía utilicen Windows 7 Professional o Windows 7 Enterprise pueden pagar por una protección extendida hasta por tres años. Sin embargo, podría ser oportuno simplemente comprar una nueva computadora o adquirir Windows 10.
