Nahuel Olivera, el conductor del Chevrolet Corsa que participó de la picada mortal realizada este domingo en Laferrere, admitió que su auto estaba preparado para correr carreras. Asimismo, dijo que conoció en un "picadero” al segundo joven involucrado en el accidente que terminó con la vida de Tahiel, el nene de seis años que paseaba junto a sus padres en la localidad bonaerense. Además, describió ante la Justicia las modificaciones que le había hecho a su vehículo.
El periodista de TN Ignacio González Prieto dio a conocer las declaraciones que Olivera hizo en las últimas horas ante la fiscalía. Según detalló, el detenido de 22 años empezó por reconocer su vínculo con Alexis Escribanti, el técnico radiólogo dos años mayor que manejaba el Vento que también habría participado de la carrera ilegal.
“Nos conocíamos del picadero. Íbamos a correr en el cuarto de milla del Camino de Cintura en el partido de Estaban Echeverría”, aseguró el joven, que al igual que Escribanti está imputado por el delito “homicidio doloso” y permanece preso en la Comisaria Distrital Este de Altos de Laferrere, donde ambos esperan ser trasladados.
Sobre las características del Chevrolet Corsa que manejaba, Olivera dijo: “Reconozco que mi auto estaba preparado. Es mi hobby”. Además, dio detalles con respecto a las modificaciones que le había hecho. “Tiene modificadas las levas, la suspensión, el motor, los neumáticos, el escape y tiene un nitro”, admitió.
Finalmente, negó haber participado de una picada el domingo y acusó a Escribanti de haber provocado el accidente. “Él hizo una mala maniobra, él es el culpable. No veníamos corriendo una picada, pero veníamos manejando rápido, y esa maniobra hizo que yo impactara al otro auto”, concluyó.
En tanto, Escribanti, que se fugó luego del lugar y fue detenido este lunes tras una serie de allanamientos en Laferrere, se negó a declarar ante la Justicia, según informaron fuentes del caso.
Avances en la investigación
Por su parte, la fiscal general de La Matanza, Patricia Ochoa, dio detalles sobre los avances en la causa. “El fiscal Fernando Garate, a cargo de la investigación, ya pudo ver las cámaras de seguridad y entrevistó a testigos”, sostuvo en diálogo con Radio Rivadavia, y agregó: “La idea es que podamos llegar a recolectar todas las pruebas lo más rápido posible para llegar a un debate oral. El delito de homicidio simple, por el que fueron imputados, no es excarcelable".
Según informó este medio, entre las pruebas técnicas que se esperan para esclarecer el caso se encuentran las pericias accidentológica y mecánica, las que junto con las grabaciones obtenidas permitirán reconstruir lo que pasó este domingo en la esquina de Ruta 21 y Soldado Sosa. Fue allí donde las maniobras a alta velocidad de Olivera y Escribanti habrían generado que la conductora de un Volkwagen Fox, que circulaba con normalidad, atropellara al nene de seis años.
Respecto de los elementos de prueba, González Prieto añadió: “También para ello se puede usar una pericia química. Seguramente también se va a hacer un análisis de la cinta asfáltica para ver si el asfalto tuvo alguna influencia sobre el accidente”.
